ETA cierra la campaña electoral asesinando
ETA se hizo presente, y lo hizo de la manera más, cruel, vil y cobarde, la única forma en la que sabe hacerlo: matando. Su víctima fue Isaías Carrasco, ex concejal del PSE, que murió tras ser tiroteado junto al portal de su casa en Mondragón (Guipúzcoa). ETA le mató con saña en presencia de su mujer y de su hija asestándole hasta tres tiros por la espalda, que le alcanzaron en la cabeza y en el pecho y acabaron con su vida. Carrasco es quinta víctima de ETA esta legislatura y la primera que la banda terrorista asesina en Euskadi desde hace más de cinco años. Fue sobre la una y media de la tarde a altura del número 6 de la calle Navas de Tolosa, en el barrio de San Andrés de Mondragón, cuando un etarra, vestido totalmente de negro, a cara descubierta y disfrazado, al parecer, con una barba postiza, disparó al menos tres veces «por la espalda» a Carrasco cuando salía del portal de su domicilio. Los disparos le provocaron heridas mortales «en la cabeza y el pecho», según confirmó el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.
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