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Ayer empezó oficialmente la suspensión de las clases presenciales, durante dos semanas, en todos los centros educativos de Ibiza y Formentera para evitar posibles contagios por COVID-19. Una medida que durante días ha sido un pozo de contradicciones por parte del Govern balear.

Primero fue el debate sobre la presencia física del personal docente en los colegios –se han puesto en marcha medidas de teletrabajo–, después las dudas sobre si las escuelas ibicencas tienen las herramientas adecuadas para gestionar la labor didáctica de forma telemática y, ahora, la controversia que ha generado la asistencia de los equipos directivos a los colegios. En este sentido, Present Ortiz, directora del CEIP Sant Jordi, destacó que las instrucciones desde el Govern balear han sido estresantes. «Hemos vuelto locos a los claustros docentes con tantas reuniones. Esperamos que, a partir de ahora, las directrices educativas por parte de la administración autonómica no sean ambiguas», expresó.

Por carta Asimismo, Ortiz adelantó a este medio que desde la Asociación de Directores de Infantil y Primaria de Ibiza, van a enviar una carta a la Conselleria de Educación rechazando la obligatoriedad de asistir de forma presencial, y reclamando más «claridad» en sus instrucciones educativas. Según fuentes de esta entidad, ante las circunstancias excepcionales que ha generado esta pandemia internacional, sería una irresponsabilidad organizar la programación desde las escuelas. «No es necesario trabajar desde el colegio, disponemos de herramientas online para el seguimiento telemático de la actividad docente», agregó. Asimismo, argumentaron que el artículo 9, de contención al ámbito educativo, del Real Decreto de estado de alarma por la crisis sanitaria, no establece ninguna norma de servicios mínimos. No hay que olvidar que, la semana pasada, el Govern balear ordenó un régimen de turnos escalonado para que los miembros de los equipos directivos no coincidieran en los colegios y tuviesen una flexibilidad horaria a la hora de trabajar. Una medida que para los directores «no tiene sentido». «Nuestra presencia no es necesaria para nada, desde casa podemos resolver cualquier contratiempo o imprevisto que pueda suceder», apuntaron desde la entidad.

Interrogantes Si bien es cierto, siguen existiendo interrogantes en el ámbito docente que las familias necesitan conocer. Especialmente aquellas dudas y cuestiones relacionadas con las personas que están en situación de necesidad. Entre ellas, qué pasará con las becas de comedor o qué medidas se llevarán a cabo con los alumnos que no pueden acceder a Internet. En esta línea, según el presidente de la Asociación Profesional de Docentes de Ibiza (APDE), Joan Amorós, estas subvenciones se mantendrán y, además, desde la Conselleria de Educación se ha remitido a las instituciones escolares un formulario para que los docentes comuniquen qué estudiantes, sin beca, son susceptibles de recibir una prestación extraordinaria para alimentación. En el caso de las personas con dificultad para acceder a las plataformas online, los colegios se adelantaron y, desde la semana pasada, centros como el de Sant Jordi, Santa Eulària, Cas Serres o Balansat, repartieron entre su alumnado material físico para los próximos días.

«Tengo en mi casa más de 40 hojas de ejercicios didácticos», resalta Candela, madre de una niña de ocho años, alumna del CEIP Santa Eulària. Otra cuestión que preocupa a las familias es cómo se van a gestionar las herramientas pedagógicas en la red. «No sabemos si será en tiempo real, con el envío de material didáctico o a través de vídeos», destacó Fávio, padre de una niña de seis años, alumna del CEIP Balansat. Sin duda, muchas dudas que desde la dirección de los centros quieren resolver lo antes posible. Por este motivo, los claustros educativos han trabajado todo el fin de semana con el objetivo de programar el Plan de actuación que exige Inspección Educativa durante este estado de emergencia.

Agradecimiento «No ha sido fácil y se han dado situaciones personales difíciles, pero los profesores han demostrado su total implicación en el proyecto», así quiso agradecer la directora del CEIP Cas Serres, Mónica Salom, la labor de sus docentes. Las mismas palabras de gratitud tiene Javier Escudero, director del CEIP Santa Eulària, por el esfuerzo de los profesores durante estos últimos días a la hora de elaborar la programación. Un material que cada escuela ha hecho de manera autónoma, pero con pautas comunes. En el caso de Infantil, se hará un seguimiento a través de fichas didácticas elementales e ilustrativas. En Primaria, el refuerzo consiste en realizar actividades de cálculo mental o elaborar frases gramaticales sencillas, y los de Secundaria podrán utilizar herramientas como Moodle para trabajar online y facilitar el trabajo, puntualizó Amorós.

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