El conjunto de Paco Jémez salió al campo mucho más enchufado que su rival. Se adueñó de la pelota y manejó a su rival como si fuera un títere. La abrumadora diferencia de juego se trasladó pronto al marcador. A los diez minutos de juego, Gallar entró libre de marca en el área. Bebe le vio y le cedió la pelota y el catalán regaló el tanto con un pase lateral a Mo Dauda, que sólo tuvo que empujar la pelota en boca de gol y sin oposición.
Los celestes siguieron a lo suyo y buscaron el segundo en un zapatazo lejano de Eugeni que el portero envió a córner. Poco a poco, el cuadro herculano fue haciendo acto de aparición y nivelando las fuerzas. Eso sí, tuvo que esperar hasta el minuto 22 para protagonizar su primera aproximación de peligro en un disparo de Soldevila que se marchó al lateral de la red.
Lo curioso es que no necesitó mucho más el equipo local para nivelar la balanza. En el minuto 27, un remate que taponó Guillem Molina acabó con la pelota en pies de Dani Romera, quien, libre de marca, fusiló la portería desde el punto de penalti.
El partido era otro. El conjunto blanquiazul se vino arriba y el duelo se equilibró por completo. Sin embargo, la alegría no le duró mucho al Hércules. Cinco minutos después del empate, Gallar cabeceó a la red un buen centro de Olabe desde el costado derecho. El mediapunta celeste pidió perdón durante la celebración por su pasado herculano.
La Udé pudo poner tierra de por medio en el minuto 39. Una recuperación de Bebé en la presión alta permitió a Mo Dauda enfilar portería y cerder la pelota a un López-Pinto que disparó al muñeco en muy buena posición. Fue la última gran ocasión de una primera mitad que terminó con 1-2 en el marcador.
La segunda mitad comenzó con una tempranera ocasión de gol para los ibicencos. Tras apenas un minuto de juego, un error en el pase del portero local permitió a Mo Dauda hacerse con la pelota y disparar desde la frontal. El tiro golpeó ligeramente en Montoro y acabó en el cuerpo del cancerbero.
El que no perdonó la primera que tuvo fue el Hércules. En el minuto 54, un pase mágico de Javi Moreno dejó a Soldevila mano a mano con Ramón Juan, al que superó con un disparo cruzado. De nuevo volvía la igualdad al tanteador.
A Paco Jémez no le gustaba lo que veía en el campo y decidió realizar un doble cambio. Gori y Domènech entraron por López-Pinto y Olabe, respectivamente. Acto seguido, la polémica hizo acto de presencia. Mo Dauda fue objeto de un posible penalti. El árbitro no sólo no lo vio así, sino que amonestó al delantero.
La acción clave del choque se produjo cuando quedaba poco más de un cuarto de hora para el final. Un misil de Bebé desde fuera del área encontró respuesta en una manopla providencial de Hernando, que tocó lo justo el esférico para que este se estrellase en el larguero. En la siguiente acción, Javi Moreno marcó un gol de bandera, zafándose lateralmente de quienes trataban de obstaculizarle hasta encontrar posición para ejecutar un trallazo al fondo de la red. Del 2-3 se pasó al 3-2 en cuestión de segundos.
La Udé estaba en serios problemas. Y es que necesitaba dos goles para recuperar el liderato. Jémez movió de nuevo el banquillo. Metió en el campo a Quique por Javi Jiménez para jugar con dos delanteros y tomar más riesgos. Precisamente el exfutbolista del Eibar tuvo una buena opción de marcar tras un pase interior de Gallar, pero su disparo fue directamente al portero. Zarzana por Eugeni fue la última puesta en escena del técnico celeste para buscar la igualada, pero esta no se produjo. La UD Ibiza hincó la rodilla, firmó su tercer partido seguido sin ganar y se queda sin liderato.
4 comentarios
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PeroPobres los otros de rojo, que no tienen ni pagar el mantenimiento que se lo pagamos todos con nuestros impuestos.
Estos pobres pierden siempre
Ahora lo q hay q hacer ,es ir a CAN MISSES el próximo partido y animar!!!!!No solo cuando gana
Bien Hércules, bien.