La versión que le ofrecieron fue que una bala «rebotada» le había entrado por la axila, «justo por donde no protegía el chaleco, y se le cruzó de derecha a izquierda por los pulmones» y aseguraron que las lesiones causadas por el proyectil eran «incompatibles con la vida». A pesar de que esta fue versión principal, que apuntaba a un desafortunado accidente, uno de sus compañeros, Fran Jordi, decidió contar lo que estaba ocurriendo. En una entrevista explica que al ver a su amigo en el suelo lloró y fue entonces cuando un sargento, a gritos, le dijo: «No llores, maricón de mierda. Aquí has venido a morir, y si no, te vas a trabajar al Mercadona» y también como después empezaron las irregularidades. «La primera orden que recibimos por parte de los mandos fue recoger los casquillos de la zona» alterando de esta forma el escenario de lo que podía ser un crimen.
Una vez que falleció su amigo «el capitán nos pidió que mintiéramos sobre nuestras posiciones a la Guardia Civil. Nadie se atrevía a desacatar la orden ilegal del capitán, por temor a represalias». Entonces empezó a grabar las conversaciones para acabar entregándolas a los encargados de investigar la muerte de su compañero. Salvados ha emitido la grabación que se produjo en el desplazamiento hacia la Comandancia de la Guardia Civil: «Estos hijos de puta, picoletos de mierda. como no pueden probar que fue un rebote. ¿Qué quieren buscar? Que fue un fallo nuestro. En el caso este que se quedó alojado en el cuerpo y deformado, está claro que era un puto rebote». Y continúa diciendo «si os ven nerviosos, Jordi, os van a acribillar. Es hora de estar tranquilos y decir 'Sí, no y no sé' y ya está. Y en vez de cinco horas estaréis dos».
Durante su declaración, Fran Jordi enseñó las pruebas que tenía a la Guardia Civil. «Le planté el teléfono móvil en la mesa y le dije, esto es lo que está pasando. No sé el qué, pero algo están ocultando. Le puse el audio y no daba crédito. Me dijo que esperase un momento y llamó al teniente de la Guardia Civil. Me dijo que yo sí era un caballero legionario de verdad y me dio un abrazo», ha explicado.
Por otra parte, Juan José Jiménez ha dicho que cuando recibió la sentencia pensó que «todos absueltos menos el sargento, que por matar a un chaval de 21 años, 2 años y 8 meses. Aunque está probado cómo lo mató y que lo mató él, y que por andar detrás de Fran Jordi por no seguirles el rollo 11 meses más. Total por joderle la vida a dos chavales, 3 años y 10 meses ¿Dónde está la justicia? Justicia militar. Se equivocan en aplicar una justicia de otra época, de otro régimen», ha sentenciado.
5 comentarios
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Todos sabemos que pasó con el pobre chaval. Muchos de primera mano. La gente buena tiene las de perder... los malos son muchos. Verguenza tendría que dar a muchos. Legionarios de verdad, había pocos en el pelotón.
Si no hay justicia para los ciudadanos de a pie, ¿¿creéis que la va a haber para los peces gordos??
Una auténtica vergüenza, auténticos delincuentes probados Como el capitán Cabello, los dos tenientes, el sargento y toda la panda de cobardes de compañeros presentes en el homicidio que se cagaron y fueron serviles a unos delincuentes manipuladores... Ánimo y fuerza Juanjo, un beso muy fuerte Chari, a Alejandro lo tenga dios en su gloria, y espero y deseo que que esos delincuentes acaben condenados y expulsados con deshonor del ejército, son una vergüenza para tan gloriosa institucion, y como te dijo el teniente de la guardia civil Sr. Jordi usted si que es un ejemplo de honor y coraje, y un legionario ejemplar.
Vergonzoso
Está es la justicia en España.alguien esperaba otra cosa ???????. No seamos ingenuos.