Un joven asesinó a balazos al árbitro de un partido de fútbol de un torneo de barrio disputado en la provincia argentina de Córdoba, en el centro del país, según informaron fuentes policiales.

El agresor, al ser expulsado por propinarle un golpe a un rival, cogió un revolver que tenía en su mochila y le disparó al árbitro del encuentro, César Flores, de 48 años.

«Todo pasó durante un partido de fútbol. No sé qué le habrá cobrado (pitado el colegiado), se fue enojado a buscar un arma y mató al árbitro», explicaron fuentes policiales.

El hecho ocurrió este domingo y las pericias determinaron que Flores recibió tres impactos de bala, uno en la cabeza, otro en el cuello y el restante en el pecho.

El atacante, que continúa prófugo, también hirió de un disparo en el pecho a otro jugador, Walter Zárate, de 25 años, quien se encuentra internado en un hospital pero fuera de peligro.