Fotografía de archivo, del 25/11/09, de Santiago Mainar, condenado a 20 años y nueve meses de cárcel por el asesinato en 2007 del alcalde de Fago (Huesca). | Efe

Santiago Mainar, condenado por el asesinato del alcalde de Fago (Huesca), saldrá este martes de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Valdecilla de Santander, donde se encuentra ingresado desde ayer tras experimentar una mejoría en su estado de salud.

Mainar, que fue derivado de la cárcel de El Dueso (Santoña) donde cumple condena al centro sanitario, pasará a un módulo especial para reclusos que hay en este hospital de la capital cántabra.

Se trata de la Unidad de Acceso Restringido (UAR), un módulo sanitario especial destinado a presos y detenidos que necesitan tanto asistencia médica como vigilancia policial, según han indicado fuentes policiales.

DEL DUESO A VALDECILLA

Mainar, que fue condenado a 20 años y nueve meses de prisión por el asesinato en 2007 del alcalde de Fago, Miguel Grima, fue hallado el lunes «en estado desorientado» por su compañero de celda, según informaron fuentes penitenciarias, que negaron que se encontrase en coma, como se había difundido en un principio.

El compañero de Mainar avisó a los funcionarios de la prisión y, tras ser examinado en la enfermería del centro penitenciario, se decidió su traslado a Valdecilla.

CRIMEN Y CONDENA

Santiago Mainar fue condenado por el asesinato del alcalde de la localidad altoaragonesa de Fago, el 'popular' Miguel José Grima, en enero de 2007, en una noche en la que la víctima, que regresaba a su casa de una reunión con otros regidores del partido en Jaca, detuvo su vehículo en la carretera al encontrarse con piedras en la calzada que impedían el paso.

Tras esta emboscada, Grima salió de su coche y recibió al menos cuatro tiros de una escopeta de postas. Su cadáver fue arrojado a un barranco, mientras que el vehículo apareció días después, abandonado en una pista forestal de Berdún, a unos 12 kilómetros de Fago.

Mainar, guardia forestal de profesión, fue detenido tres semanas después, a principios de febrero de ese año, después de que comprobar que el ADN obtenido de su saliva -que el mismo había dado voluntariamente- coincidía con el hallado en el vehículo del alcalde.

Desde un primer momento Mainar había sido foco de atención de autoridades y medios de comunicación, a los que concedió varias entrevistas tras la muerte de Grima, y ante los que se confesó como una de las personas que había «sufrido» al alcalde.

Las rivalidades y pleitos entre ambos eran conocidos, ya que Mainar se había presentado por el PSOE a las últimas elecciones a la Alcaldía, partido que se desmarcó después de él. Tanto el detenido como la víctima poseían cada uno una casa rural en Fago, las dos únicas existentes en este pequeño pueblo oscense, que cuenta con una veintena de habitantes y que se convirtieron en los primeros sospechosos tras el crimen.