Los magistrados de la Sección Primera de la Audiencia Provincial celebrarán esta semana en Eivissa diez juicios por presunto tráfico de drogas cometido en la Isla en los que, en total, trece personas se sentarán en el banquillo de los acusados.
Entre estos casos se encuentra el de la española M.C.R.D. y el también español M.P.M, de 30 y 24 años de edad, respectivamente, que fueron detenidos a las 4,30 de la madrugada del 13 de junio de 2010 en la puerta de una discoteca de Sant Antoni en la que ofrecieron dos envoltorios con MDMA a dos agentes de la Guardia Civil que patrullaban de paisano.
La acusada tenía en su poder 16 envoltorios de MDMA. El ministerio público pide para cada uno de ellos una pena de cuatro años y seis meses de prisión y una multa para cada uno de 587,70 euros.
Siete años
La Audiencia también dirimirá el caso del senegalés I.F.S., de 31 años, que fue detenido por agentes de la Policía Local de Sant Antoni cuando en la calle Vara de Rey de esta localidad entregaba a personas no identificadas una bolsa con dos pastillas de MDMA a cambio de diez euros. Según se explica en el escrito de acusación, el acusado mordió en la mano a uno de los policías «con clara intención de impedir que el agente hiciera su trabajo».
El mordisco causó una erosión en la cara interna del tercer dedo de la mano izquierda del policía que le impidió trabajar durante dos días y que tardó nueve en curar. El senegalés se enfrenta a una pena de siete años de prisión, cinco por tráfico de drogas y dos por el delito de atentado que representa el mordisco, según se explica en el escrito de acusación.
El ministerio público también reclama siete años de cárcel para el francés P.G.R.H., de 50 años de edad y sin antecedentes penales, que fue detenido el 15 de octubre de 2008 cuando, en el bar del que este hombre era encargado, fue sorprendido entregando a otro hombre una bolsa con 1,219 gramos de cocaína de una riqueza media del 22% a cambio de 55 euros. En el registro posterior los agentes hallaron seis bolsitas de plástico con un total de 4,054 gramos de cocaína, además de 280 euros que, según el ministerio público, procedían de la venta de drogas.
Los otros nueve acusados restantes por presunto tráfico de drogas cometido en Eivissa que esta semana serán juzgados por la Sección Primera de la Audiencia Provincial se enfrentan a penas que oscilan entre los tres y los cinco años de cárcel.
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