Facebook bajo sospecha

Dichos mensajes se emitieron justamente horas después de que el sospechoso precisamente recuperara su libertad por un delito de maltrato en el que la víctima denunció haber sufrido una agresión.

Tras la última detención del acusado, éste fue encarcelado como supuesto autor de un delito de quebrantamiento de condena. La medida cautelar se adoptó después de que la perjudicada, que había sido amenazada de muerte, asegurara que tenía mucho miedo de lo que le pudiera pasar.

El sospechoso compareció ayer ante la titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa, la magistrada Clara Ramírez de Arellano. Negó en todo momento ser el autor de dichos mensajes. La perjudicada, sin embargo, señaló que no tenía ninguna duda porque su 'estilo' y una falta ortográfica le delataron. Dicho error se rencontraba en otro mensaje anterior.

La defensa, pese a este argumento, indicó que cualquiera que conociera la clave de la página de Facebook de su cliente pudo entrar en ella y realizar los mensajes, dejando, con ello, abierta la puerta a todo tipo de hipótesis.

El padre del sospechoso, por su parte, indicó en la vista oral que ese día estuvo en todo momento con su hijo y que éste sólo se conectó en una ocasión a internet y fue brevemente para consultar si se había recibido el ingreso de un dinero que esperaba. Según su declaración, no lo hizo más porque, para ello, hubiera tenido que salir del inmueble donde ambos se hallaban. La defensa también argumentó que los mensajes fueron recibidos por la tarde y que el acusado sólo utilizó los servicios de la red para esta gestión bancaria durante la mañana.