Tomás Arrollo, 'El Brujo', en una imagen de tomada cuando acudía a declarar ante el juez Mendoza en mayo de 2008. | ultimahora.es

Tomás Arroyo Rodríguez, 'El Brujo', se sentará en el banquillo de la Audiencia Provincial entre los próximos días 21 y 26 de noviembre, ambos incluidos, para enfrentarse a una petición de condena de 138 años de cárcel por parte del Ministerio Público, que considera que probado que entre 1995 y 2006 abusó de trece menores aprovechándose del influjo y poder que logró tener sobre ellas.

Se prevé un juicio multitudinario que podría generar una gran expectación entre los medios de comunicación no sólo locales, por lo que la Audiencia Provincial ha pedido al Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) que habilite una sala con el objeto de que la vista se pueda celebrar en buenas condiciones.

'El Brujo' está acusado de abusar sexualmente de estas jóvenes, con edades comprendidas entre los 11 y los 17 años, entre los años 1995 y 2006. Deberá responder por un total de 19 delitos de abusos sexuales.

Junto a 'El Brujo' se sentará en el banquillo Alberto C.C., 'compañero' del principal acusado, a quien se le imputan siete delitos continuados de agresión sexual y un delito de abusos sexuales». Este hombre se enfrenta a una petición de pena por parte del Ministerio Público de 34 años de prisión.

Una gran sala

A los acusados y sus abogados hay que sumar las numerosas acusaciones particulares y la declaración de un número indeterminado de testigos, por lo que es necesaria la habilitación de una gran sala en la sede judicial ibicenca, tal y como se hizo con los juicios del edificio Barceló y del vertido de combustible de la gasolinera de Santa Gertrudis.

En la investigación judicial no se pudo determinar con exactitud el número exacto de veces que 'El Brujo', presuntamente, forzó a cuatro de sus víctimas. En un cuarto caso, además, se considera que estuvo abusando de la menor al menos una vez al mes. Por este último hecho, el fiscal pide para Arroyo Rodríguez 14 de los 138 años de pena que se juega.

El resto de adolescentes se vieron obligadas, pese a las probadas reticencias de éstas, a repetir con el falso terapeuta o mentalista en distintas ocasiones, algunas veces en Eivissa y otras en Valencia.

En casi todos los casos se apreció que las jóvenes habían sido penetradas vaginalmente, ya fuera en encuentros en domicilios particulares, coches, hoteles o bosques. Los exámenes médicos a los que fueron sometidas las perjudicadas evidenciaron que todas ellas tienen como secuela algún tipo de trastorno psicológico, o se estima que probablemente lo desarrollarán en el futuro. Los abusos que sufrieron les han acarreado todo tipo de problemas emocionales y de conducta a la hora de su desarrollo personal.

'Seducción'

Promesas, regalos, talismanes, cenas y conversaciones con los padres en Eivissa y Valencia, lugares donde tuvieron lugar los abusos, precedieron a las agresiones que se le imputan. El mecanismo de 'seducción' que, presuntamente, empleaba era el mismos en todos los casos.

Tras contactar con las adolescentes, las llevaba a lugares apartados y allí las conminaba a tener relaciones sexuales completas, instándolas luego a un supuesto 'pacto de silencio' que debían respetar todas sus pupilas para evitar que pudieran recaer consecuencias sobre ellas y sus familias.

Cañizares fue imputado y luego exonerado

El ex portero de la selección española de fútbol Santiago Cañizares declaró primero como testigo y después como imputado en este caso. Finalmente, el juez Pablo Mendoza lo exoneró de su imputación. Varias de las chicas que denuncian a 'El Brujo' dijeron que habían mantenido relaciones en grupo con Cañizares por recomendación del primero cuando al menos una de ella era menor de edad. Cañizares negó haber tenido sexo con las jóvenes. Por su parte, el juez lo exoneró porque no hay «datos objetivos que permitan asegurar con un mínimo de certeza que el señor Cañizares conocía la situación de prevalimiento y se aprovechó de ella».

Tras casi tres años en prisión preventiva, asegura que es inocente

'El Brujo' lleva casi tres años en prisión preventiva. En octubre pasado se cumplieron dos años de su ingreso en el Centro Penitenciario de Eivissa, por lo que la Audiencia Provincial prorrogó su situación hasta el día del juicio. En aquella ocasión, Arroyo, quien durante los meses previos estaba pendiente de los informes psiquiátricos y psicológicos que pidieron las partes y en los que se acredita que era una persona consciente de lo que, supuestamente, hacía, volvió a declarase inocente. Asegura que las relaciones sexuales siempre fueron consentidas.

El caso fue instruido en su mayor por parte por el entonces juez del Juzgado de Instrucción número 3 de Eivissa, Pablo Mendoza, que denegó en repetidas ocasiones la puesta en libertad del acusado, pues entiende que los delitos que se le imputaban podían llevarle a la tentación de huir.