El conductor B.R.R., sevillano de 36 años de edad, ha sido condenado a cuatro meses y 16 días de prisión y la retirada del carné por un periodo de tres años por conducir bajo la influencias de bebidas alcohólicas, negarse a realizar el test de la alcoholemia y llevar un vehículo habiéndosele retirado el permiso previamente por un delito parecido.
En la sentencia, dictada por la magistrada del Juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, Martina Rodríguez Caritg, se recuerda que, el 7 de abril del 2008, B.R.R. fue condenado a una multa, a 22 días de trabajo en beneficio de la comunidad y a un año sin permiso de conducir por alcohol al volante.
«A pesar de ello», recoge la sentencia, «sobre las 03,30 horas del 12 de julio de 2008, el acusado, tras haber ingerido una cantidad no determinada de bebidas alcohólicas (...) se puso a los mandos de un Toyota Yaris (...) y conduciendo por la avenida Isidor Macabich de Eivissa colisionó, por alcance, con un Fiat Panda». Cuando llegó la policía, B.R.R. se negó a someterse al test del alcohol, «no constando que fuera informado de las consecuencias de ello», señala la juez en el capítulo de hechos probados.
Síntomas
Los agentes declararon que el acusado mostraba claros síntomas de estar bebido, como «descoordinación de movimientos, habla pastosa, ojos vidriosos fuerte halitosis alcohólica y gran nerviosismo».
En el juicio, el acusado declaró que no era él quien conducía cuando el Toyota chocó por detrás contra el Fiat, pero en la sentencia la juez argumenta que en el atestado se recoge que el propio B.R.R. dijo a los policías: «Éste es con el que he tenido el choque», en referencia al conductor del Fiat Punto.
Un puñetazo en la cara al piloto del otro coche
Además, B.R.R. ha sido condenado por la comisión de una falta de lesiones a pagar una multa de 150 euros. Según la sentencia, el acusado asestó un puñetazo en la cara al conductor del Fiat Punto con el que chocó por detrás, y lo hizo en presencia de los agentes de la Policía Local de Eivissa que acudieron al lugar del accidente. El conductor agredido, un hombre de nacionalidad italiana, sufrió lesiones de carácter leve que tardaron dos días en curar, por lo que B.R.R. tendrá que indemnizarle con la cantidad de 160 euros.
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