El drogotest no va

Los agentes de Sant Antoni dispusieron de él el pasado mes de julio. Sin embargo, no lo utilizaron, según confirmaron todas las fuentes consultadas por este periódico.

La razón principal es que el Drager Drug Test 5000, nombre del aparato portátil cedido por la conselleria d'Interior, no cuenta con la homologación necesaria para que el juzgado lo considere una prueba de cargo.

En Sant Josep, los agentes locales ni siquiera se lo han planteado. El aparato tenía que estar en su poder este mes. A estas fechas nadie lo ha visto y lo que es igual de importante, nadie pregunta por él.

El interés por disponer del «invento» es nulo pese a que con él se localiza la presencia de anfetaminas, opiáceos y cocaína, entre otras sustancias. «Más que una ayuda es un problema. En la jurisdicción española no cuenta con ninguna garantía. Si hacemos una prueba con él y el conductor nos pide explicaciones, el problema puede ser para nosotros», explicó un agente local de la isla cuando se le preguntó por esta cuestión. El Govern lo cedió a los ayuntamientos para que lo utilizaran como prueba piloto durante un mes. El Drager Drug debería ser enviado a Formentera en septiembre y en los meses siguientes deberían repartírselo las policías locales de Evissa (octubre), Santa Eulària (noviembre) y Sant Joan (diciembre).

Sin protocolo

La ausencia de un protocolo conjunto para su utilización es otra de las razones que está utilizando su uso. «En Cataluña sí está utilizando un sistema similar los Mossos d'Esquadra, pero nosotros estamos pendientes de un informe jurídico que aclare distintas cuestiones», aclaró un mando policial de la isla al preguntársele si lo iban a utilizar.