Las dos últimas víctimas mortales en menos de diez días en las carreteras pitiusas (un motorista alemán fallecido el 26 de octubre en Formentera y el joven argentino atropellado el pasado viernes en la carretera de Sant Josep) han elevado a 21 el número de fallecidos por accidentes de tráfico en carretera. Esta cifra se acerca peligrosamente a los 23 fallecidos en accidentes de tráfico que se registraron el pasado año hasta las mismas fechas del mes de noviembre.

2005 fue un año funesto para las carreteras pitiusas. Sin embargo, un 2006 que alcanzaba el cuarto mes del año con dos víctimas mortales en accidentes, cuando su predecesor contaba por las mismas fechas con cinco fallecidos, ha visto cómo a partir del mes de mayo el número de muertes en la carretera ha ido creciendo mes tras mes.

Esta coincidencia del aumento del número de accidentes mortales con el inicio de la temporada estival también se apreció en el año 2005: entre los meses de mayo y septiembre del año pasado 16 personas perdieron la vida en nuestras carreteras; en el mismo período del año en curso, 17 personas fallecieron. Estas cifras reflejan que durante los meses de verano las carreteras sumaron en 2005 aproximadamente la mitad del total de víctimas mortales y este año dos terceras partes del total. Aún así, los números señalan que fueron mayo, julio y noviembre de 2005 los meses más aciagos, con 5 víctimas mortales cada uno. Mayo de 2006 registró cuatro muertes, tres de ellas en un único accidente mortal. Julio acabó con cuatro fallecidos y la estadística de noviembre se inició el pasado viernes con un atropello mortal.

Mayo, julio y agosto fueron los meses que más muertes han contabilizado durante este 2006, que a pesar de que se inició mucho mejor que el anterior año, está resultando especialmente malo para las carreteras de Formentera, que suman 7 fallecidos.