En este sentido, Marí aseguró que pese a los avances en el modelo de gestión de residuos de Ibiza, es necesaria una reducción y reutilización de estos, ya que se produce casi 2kg de residuo por día y habitante. Por ello, sigue siendo fundamental abordar nuevas estrategias que cumplan con los objetivos de las nuevas normativas autonómicas y estatales.
Con la puesta en marcha de la planta de selección de Ca na Putxa en 2020 se logró recuperar en torno al 50% de los residuos, generando 14.000MW anuales de energía renovable, unas 1.500 toneladas anuales de compost de calidad y hasta 20.000 toneladas al año de compost bioestabilizado. Sin embargo, tal y como asegura el presidente del Consell de Ibiza, Ca Na Putxa "tiene una vida limitada» y ya se está trabajando en buscar alternativas futuras. «En 2020 se realizó un estudio de alternativas, poniendo en la mesa diferentes soluciones. Es necesario elegir la solución más eficiente desde el punto de vista medioambiental», aseguró Marí, que también confirmó que iban a ampliar el estudio realizado.
La jornada contó con dos bloques y una mesa redonda. El primer bloque abordó cuestiones de diseño y eficiencia en instalaciones de gestión de residuos, mientras que en el segundo se debatieron las estrategias municipales para una adecuada gestión de residuos. Finalmente, en la mesa redonda «Objetivo 2030: reciclar al menos el 65% de los residuos municipales» se debatió sobre este nuevo objetivo de la nueva Ley de residuos, que afirma que para 2035 debe aumentarse a un 65% en peso la preparación para la reutilización, reciclado y valorización de materiales. Además, esta nueva ley también contempla que deben recogerse de forma separa un 50% en peso del total de residuos municipales y establece un máximo del 10% de eliminación de residuos mediante depósito en vertedero.
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