Imagen de archivo de mujeres ejerciendo la prostitución.

El mundo de la prostitución en Ibiza refleja realidades diferentes a las que puedan existir en otras zonas del país, principalmente debido a la insularidad y al importante factor turístico. Es una de las conclusiones que pueden extraerse del ‘Estudio sobre las situaciones de prostitución en Ibiza’ presentado ayer desde el Consell d’Eivissa.

Del interesante trabajo se desprende que, en Ibiza, las situaciones de prostitución suelen producirse de manera oculta en pisos y a través de webs y, además, la oferta se concentra mayoritariamente en Vila, con un 76,5% de casos registrados.

Los responsables del estudio han recopilado datos sobre la oferta localizada (calle y clubs) o deslocalizada (pisos y webs) en Ibiza y también han realizado encuestas a personas que actualmente ejercen esta actividad.

A través de 34 entrevistas y en cuanto a la distribución según ambientes, del informe se desprende que cerca del 20% de prostitutas ejercía en la calle o en clubs de alterne, mientras que un 52,9% de quienes trabajaban de manera deslocalizada, lo hacía en pisos. En concreto, esta información fue recopilada de junio a septiembre.

Otro dato llamativo es que, durante el trabajo, en Ibiza se contabilizaron 294 personas en situación de prostitución en pisos y 34 en webs especializadas.

Entre otras características relevantes, los datos permiten hablar de nuevas modalidades de trata y explotación sexual, así como de jóvenes prostituidores, principalmente por la influencia de la pornografía o de redes sociales. También se desprende que los sistemas de protección jurídica frente a la trata no son efectivos.

Características

El estudio destaca que en Ibiza la mayoría de prostitutas son latinoamericanas (82,4%), sin regularizar y mayores de 30 años. Cerca de la mitad (44,2%) lleva menos de dos años en la isla.

Un 64,7% de las entrevistadas tienen hijos a su cargo y un gran porcentaje (38,2%) no cuenta prácticamente con ningún apoyo social. Otro dato escalofriante es que el 47% de estas mujeres se encuentran en una probable situación de trata, sin controlar sus ganancias en un 50% de casos o recibiendo amenazas en el 47,1% de situaciones.

También, 47,1% de mujeres reconoce percibir situaciones de peligro o de amenazas y un 20,6% asegura no poder elegir a sus clientes o prostituidores. En un 14,7% de casos, este hecho depende de diversos factores.
Las infecciones o que sus clientes rechacen usar preservativo son otras grandes preocupaciones para las prostitutas en Ibiza. El 45,5% de estas mujeres han sufrido violencia física; un 70,6% maltrato emocional y un 26,5%, violaciones o abusos sexuales. De hecho, este mismo porcentaje de prostitutas (26,5%) asegura haber sufrido estas agresiones sexuales en el último año.

La gran mayoría de estas mujeres tiene problemas para conciliar el sueño; casi el 68% sufre depresión e incluso un 32,4% ha tenido ideas suicidas. Un 2,9% se encuentra ahora mismo en riesgo de suicidarse. Un 97% asegura que dejaría esta actividad en caso de poder encontrar un trabajo en condiciones.

En cuanto a los clientes, en el momento de la encuesta la mayoría de ellos eran hombres, tanto jóvenes (52,9%) como mayores (47,1%), con recursos y tanto españoles como extranjeros. Un 64,7% de estos clientes eran turistas extranjeros.

Con «demasiada frecuencia», según el estudio, solicitan prácticas de riesgo.

Valoración

La consellera de Bienestar Social y Recursos Humanos, Carolina Escandell, manifestó que, el presentado ayer, es un estudio «muy documentado» y sobre el que se ha realizado un gran trabajo. Escandell reconoció que el objetivo es contar con datos fiables relacionados con la prostitución en Ibiza y después intervenir en consecuencia.

«A nivel nacional y también autonómico, es cierto que hay estudios de prostitución y de trata, aunque el tema de la insularidad ibicenca, el hecho de ser un destino turístico de primer orden, hace que la casuística pueda ser algo diversa», explicó Escandell.

Para profundizar en las posibles diferencias, el Consell d´Eivissa encargó el exhaustivo trabajo a la Fundación Universitaria de Baleares y ayer ya se dieron a conocer algunos ejes principales. «Se ha evidenciado que hay algunas diferencias, casuísticas que se desvían de lo que son los estudios más globales. Siempre digo que, para poder actuar, debemos contar con datos serios y rigurosos», reiteró la consellera.

Escandell reconoció la existencia de algunos factores recopilados en el estudio que le preocupan especialmente. Uno de ellos, la facilidad con la que los jóvenes de Ibiza pueden contactar con redes de trata. «Incluso en páginas tan generalistas como Instagram. Es tremendamente sencillo», lamentó.
Otro factor sorprendente, según la consellera, es que numerosas prostitutas cuentan con un nivel educacional alto, en contra de lo que la mayoría pueda creer.

«Siempre existe la tendencia y pensamos que la prostitución y la trata se centra en mujeres con un bajo nivel educativo y económico. Son mujeres en una situación de mayor vulnerabilidad, pero ello no significa que deban ser las que menos estudios tienen», concluyó