Cáritas atendió en 2018 a 1.800 personas, unas 300 más que las recogidas el año pasado. En la memoria han empezado a contabilizar núcleos familiares en vez de contabilizar solo a las personas que acuden directamente a las oficinas. «Si no tenemos en cuenta este dato total no estamos evaluando la imagen completa de la pobreza en la isla», explicó Gustavo Gómez.
Dentro de los programas, el de acogida, en el que la organización recibe a los usuarios de nueva incorporación, atendieron a 836 personas, frente a las 533 que atendieron en 2017. Un incremento del 50%.
Cabe destacar además un repunte de las personas que se incorporaron a este programa en el mes de agosto, 80 en total por las 60 del mes de julio. Una variación peculiar, dado que normalmente en ese mes el número de usuarios tiende a descender por la temporada de verano en la que hay más trabajo. «No podemos determinar que esto sea una tendencia», señaló Gómez, que explicó que el año pasado se encontraron a muchos usuarios que habían venido a buscar trabajo en temporada y no encontraron vivienda o trabajo.
También dentro de este mismo programa llamaron la atención respecto a la problemática de muchos usuarios del servicio de acogida que no se pueden empadronar por no tener un contrato de alquiler legal. Es por ello que se ha optado este año por empadronar a muchos de ellos en la sede de Cáritas.
La falta de empadronamiento provoca que estas personas no puedan escolarizar a sus hijos o acceder de manera regular a los servicios sanitarios. «Salvamos el tipo con este empadronamiento en Vila, pero está claro que es una situación que no podemos mantener en el tiempo porque no somos nosotros quienes debemos solucionar estas situaciones», alertó Gómez
Más mujeres en exclusión social
Al centro de día y al comedor para personas sin hogar acudieron en total 220 personas. Se apuntó la peculiaridad de que cada vez aumenta más el número de mujeres, 35 en total en 2018. «Antes eran un perfil residual pero ahora cada vez vienen más que viven situaciones de maltrato o de prostitución», detalló el coordinador. Estas situaciones han dado lugar a vislumbrar una problemática concreta que desde Cáritas se quiere abordar este año de un modo específico en el caso de las mujeres, para dar respuesta a los casos particulares.
En cuanto a la nacionalidad de los usuarios de este programa, principalmente son de origen europeo, de los que la mitad son españoles.
Cáritas repartió el año pasado 30.000 comidas entre desayunos y cenas a través de la colaboración de la Mesa de exclusión y de todas las administraciones de la isla. «Son muchas comidas y nos deben hacer pensar en que en una isla como la nuestra es indicativo de que algo no va bien», señalaron.
Otros programas
Gómez quiso destacar del centro socioeducativo Betania, en el barrio de Cas Serres, su evolución desde que se decidió convertirlo en un «punto de cohesión del barrio que realmente fuera la referencia a nivel social».
Si bien el número de usuarios se mantiene estable, en torno a los 260, ha variado la proporcionalidad entre hombres y mujeres. Antes era un programa que tenía un perfil de usuarios eminentemente femenino, mientras que el año pasado creció el número de varones participantes en casi un 30%.
También en el apartado formativo, por los talleres de inserción sociolaboral ‘Can Pep Xico' y ‘A tot drap' pasaron 83 personas. En ambos programas trabajan con gente que ha sido excluida del mercado laboral, muchos en edad avanzada lo que complica su reincorporación, aunque hay perfiles variados. Casi el 50% de los participantes obtuvo un contrato laboral tras participar en los programas.
En cuanto al programa de Orientación e intermediación laboral, pasaron por sus instalaciones 403 personas de las que el 64% fueron mujeres. Gómez explicó que este programa también ha evolucionado para dar una respuesta real «que tenga un mayor impacto en la vida laboral de los usuarios»
Colaboración ciudadana
En los contenedores de Cáritas se recogieron 438 toneladas de ropa en 2018. Unos números similares a los de años anteriores que denotan «la solidaridad de ibicencos y formenterenses», valoraron.
En otro ámbito de colaboración, el delegado episcopal quiso hacer un llamamiento al voluntariado, «alma de Cáritas y de sus proyectos». Expuso que la mayoría de los voluntarios son personas mayores jubiladas y por ello llamó a la gente más joven «no solo a dar, sino a darse». Indicó que en otras Cáritas a nivel estatal el número de voluntarios de entre 18 y 24 años suele ser mucho más alto que en Ibiza, algo que explicó por la falta de una universidad en la isla, dado que muchos universitarios compaginan estudios con voluntariados.
Cáritas cuenta con unos 150 voluntarios de los que gran parte lo son de forma puntual. Muchos de ellos tienen que dejarlo cuando llega la temporada turística porque empiezan a trabajar.
Por otra parte, respecto a los ingresos de la organización, el 66%, 916.000 euros provinieron de subvenciones de entidades públicas. Esta dependecia de las administraciones provocó en 2017 que Cáritas tuviera que contratar una póliza para afrontar gastos debido al retraso en la recepción de pagos. Si bien no sufrieron este problema el año pasado, quisieron hacer un llamamiento a la ciudadanía para aportar de modo particular a través de cuotas de socios o donativos. Los donativos suponen actualmente un 15% de los ingresos de Cáritas, mientras que las cuotas de socios son un 3% de los ingresos.
Cáritas de Eivissa y Formentera destinó un millón de euros en 2018 a acciones sociales.
18 comentarios
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No sé si no lees bien o directamente no sabes interpretar correctamente las frases. No se ha dicho eso.
Pues nada, si te gusta alquilarlo a turistas y sacar el triple ya sabes, el dia que te falte un medico especialista, le dices al turista que te atienda o te vas de viaje a otro hospital que cuente con ese especialista.
Es que la historia aquí, es que en vez de darle soluciones Cáritas, una Asociación sin ánimo de lucro, apostólica romana, que tiene al catolicismo como culto, y a media España en contra de sus creencias, tendría que ser el primer problema de est@s polític@s que nos gobiernan. y que solo piensa en empotronarse 4 años y vivir a costa de tod@s nosotr@s, y luego resulta que no hay agua para construir viviendas sociales, anda iros a tomar viento por ahí..vividores.
Tenemos 4 apartamentos alquilados todo el año a un precio razonable visto las burradas que se piden, todos alquilados a trabajadores que viven aqui todo el año . 2 inquilinos encantados con ellos, si hay un problema se arregla, si pasa algo se habla. Los otros dos, uno se larga dejando el piso echo una mierda, debiendo dos meses luz y agua aparte. Y el otro lleva un de un de retraso en pagos, siempre a escondidas, evitando, no respondiendo llamadas, etc. Si denuncio, tardaran un año como poco a echarlo, no recuperare ni un duro y mientras tanto he pagado luz y agua durante dos años mas los respectivos impuestos. Solucion el apartamento vacio ahora lo gestionara una inmobiliaria y mientras pagen me da igual el resto.
Antes de criticar despectivamente, lee bien lo que dicen los comentarios: muchos propietarios no quieren alquilar PORQUE TIENEN O YA HAN TENIDO PROBLEMAS, bien sea de okupas o de inquilinos que no pagan. Selectivo puedes ser, pero nadie tiene una bola de cristal para predecir el futuro. Y no es extraño que muchos opten por hacerlo turístico, pues al fin y al cabo ganan el triple y no corren tanto riesgo de que se queden en la casa sin pagar. También te digo que hay propietarios que son sensibles a la situación de la isla y les gustaría poner sus viviendas en alquiler, pero no lo hacen por MIEDO y desamparo legislativo ante posibles problemas.
Que si V.P.O, políticos, leyes..... todo eso puede contribuir en una mejora de la situación. Pero el problema es la vagancia de la gente, que prefiere vivir cn sus padres en verano, compartir cuarto en el corral de los cerdos o en una tienda de campaña con tal de alquilar su propia casa y vivir sin dar palo al agua....Així no anam. Alquilas o trabajas?
En el mundo se están produciendo cambios vertiginosos, y hay muchas posibilidades de que se produzcan graves conflictos bélicos, económicos y ambientales, que en estos casos vivir en una isla como Ibiza, sería como meterse en la boca del lobo. No sería descabellado tener algún sitio en algún pueblo peninsular, donde se pueda vivir con pocos recursos y más con los recortes en las pensiones que están por venir, esto pinta muy mal...
Venga hombre, con la cantinela de yo no alquilo a familias xq luego me la okupan y no pagan, se de un monton de gente en el hospital can missed buscando pisos y no hay o les piden una barbaridad, simplemente siendo selectivos y poniendo pisos a precio razonable el problema de que no te paguen disminuye muchisimo (y ojo estoy a favor que endurezcan la ley a los okupas y desahucio en menos de 24h). Lo que aqui hay mucho hipocrita que prefiere alquilar a turistas por airbnb, sacarse el triple al mes y luego llorar al consell xq no hay medicos y no hacen vivienda protegida, o peor aun, escudarse con el tema del catalan. La sociedad tal como esta ahora la hemos creado nosotros por nuestra manera de hacer, ahora no culpeis a los demas de las consecuencias de vuestras decisiones. Y al que dice que vaya gente hay en caritas, no se, igual esperabas a ver a gente de alto standing ahi... Ojala no te veas nunca en esa situacion.
Aaaaah la vivienda? yo pensaba que el gran problema en baleares era el catalán el mal de todos lo males, y por eso no teníamos médicos ni policia ni maestros ni nada de nada. Que hagan leyes flexibles para agilizar los trámites de desaucio y muchos propietarios a lo mejor abren sus viviendas de nuevo, que la gente está muy quemada
Que pesaos con el que no se construya!! Las cosas no son ni blancas ki negras, no paran de construir hotelazos de 5* que arrasan con todo, y ni mú, pero luego, a la hora de abrir un poco el grifo para la vivienda protegida, pequeñas viviendas para gente de aquí de tods la vida, etc...todo son trabas, y así lleva años paralizado. Luego no lloreis si osnpiden 1500 euros por un zulo.