El anuncio de la gratuidad del parquin contó con la presencia de representantes de todas las instituciones. | Marcelo Sastre

La consellera de Presidència, la ibicenca Pilar Costa, anunció ayer que el aparcamiento del hospital Can Misses será gratuito a partir del 1 de enero de 2019. En un acto celebrado ayer en el hospital Can Misses, Costa subrayó que es «una reivindicación y demanda de los ciudadanos de la isla, que no fuese un impedimento para familiares y pacientes el parking de pago; es una medida de justicia». El parquin cuenta con 900 plazas, de las que 300 están reservadas para profesionales y las restantes 600 estarán disponibles para la residentes de las Pitiusas.

La gratuidad ha sido posible a través de una ley aprobada en el Parlament en la que se contemplaba que todos los parkings de los hospitales públicos no han de ser pago y que ha dado pie al Ibsalut a hacer la resolución para la gratuidad, instando a la concesionaria, la empresa que pagó la construcción del hospital, para que deje de ser pago, lo que supondrá una perdida económica. El director del Ibsalut, Juli Fuster, anunció que «se hará una modificación del contrato de concesión para ajustar el tema del parking e incluir los servicios de esterilización que no desarrolla la concesionaria; estamos en negociación, no hay un acuerdo cerrado». Fuster aseguró que la concesionaria no puede recurrir la decisión de la gratuidad «porque hay una ley que lo respalda», aunque habrá una contraprestación. «Tienen una expectativa de negocio y esperan ganar 312.398 euros anuales para el parking de Can Misses, que es lo que pagan los usuarios; vamos a ver si el Govern tiene que pagar ese dinero o un poco menos porque incluimos otros servicios», explicó. Añadió que «ha sido un trabajo intenso, largo y complicado hasta llegar a la gratuidad» dada la concesión del hospital. «Es importante recordar eso porque el Govern no pagó para construir el hospital, sino se paga a través de un canon fijo durante 30 años menos los beneficios que tienen de gestionar los servicios no asistenciales y cambiar eso no ha sido fácil, hay que ir con mucho cuidado para no caer en errores», explicó.

Con 600 plazas disponibles a escasos metros del centro de la ciudad y con los problemas de aparcamiento, los representantes de las instituciones no creen que Can Misses se convierta en otro disuasorio ahora que es gratis. No obstante, Fuster dijo que «se ha pedido a la concesionaria que haya un refuerzo de vigilancia y seguridad». Costa añadió que si se producen problemas «se tomarían medidas necesarias en un futuro para eliminar esta mala praxis». El alcalde de Vila, Rafael Ruiz, recordó que el aparcamiento de las piscinas de Can Misses «se llena cuando hay consultas para no pagar y con la gratuidad se reducirá el de las piscinas; la gente será muy sensible y responsable», vaticinó.

Pilar Costa también aludió a otras actuaciones relacionadas como la sanidad pública, como la gratuidad de la tarjeta sanitaria para «que pueda ser pública y universal para todos»; la eliminación del copago farmacéutico para los pensionistas a partir del 1 de enero ya que aseguró que muchos no retiraban sus medicamentos porque tenían que pagar una parte y la construcción del ascensor para mejorar la accesibilidad a Can Misses, «era una reivindicación para personas con dificultades de movilidad». La consellera anunció también la puesta en marcha de la reforma del edificio J, «que comenzará en unos pocos días, pasadas las fiestas».