Joan Miquel Perpinyà | IBIZAEivissa03/05/18 23:03
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El primer teniente de alcalde de Hacienda y Administración Pública del Ayuntamiento de Ibiza, Alfonso Molina, presentó su dimisión ayer por la tarde. A través de un comunicado manifestó sentirse víctima de una campaña «absolutamente injusta» e insistió en atribuir el informe del SOIB en un «cambio interpretativo de la normativa que regula la justificación económica de las subvenciones». A pesar de ello, dijo no estar «en condiciones de desarrollar adecuadamente mis funciones».

SOIB

Molina abandona el cargo tras las informaciones publicadas en exclusiva por este periódico, sobre el contenido de un informe del Servei d'Ocupació de les Illes Balears (SOIB). En dicho documento se reclama a Molina un total de 27.133,14 euros de una subvención concedida a la empresa Serviconsult Training and Development, para cursos de formación a parados impartidos entre 2009 y 2011, en la que el SOIB detectó irregularidades.
Concretamente el SOIB acusa a Molina de subcontratar empresas de un «entramado societario» de las que él mismo es el «nexo de unión», con el objetivo de hinchar los costes y aumentar el beneficio económico. Así los sobrecostes se habrían detectado tanto en el personal docente como en el material didáctico e incluso en el alquiler del local donde los cursos se impartían.

«Juicios de valor»

En declaraciones hechas por Molina a varios medios de comunicación, el concejal negó haber cometido ninguna irregularidad con sus empresas en un episodio acaecido antes de su entrada en política y achacó la reclamación del SOIB a un cambio de interpretación de la normativa por parte de la Conselleria de Treball.
También negó los sobrecostes aunque no aportó ninguna prueba y apuntó que el informe del SOIB contenía «juicios de valor».

Reacciones

El Ayuntamiento manifestó mediante un comunicado su comprensión hacia Molina al entender que «el cuestionamiento público de su vida profesional se ha convertido en un problema» para seguir con su actividad política. Además, manifestaron que el objetivo es «mantener en todo momento la estabilidad de la institución y el ritmo habitual de trabajo», añadía la nota.
El alcalde Rafa Ruiz lamentó la marcha de Molina, de quien dijo que era «no sólo una persona íntegra y honrada sino un gran compañero y gestor, que durante tres años ha realizado una labor impecable, insuperable, al frente de áreas y ayudando al resto de compañeros».
El PP de Vila manifestó tras conocerse la noticia, su «respeto· por la decisión de Molina y consideró que la permanencia del edil en el cargo «hubiera dañado a la institución y a la imagen de la ciudad de Ibiza». Asimismo informaron que solicitarán la convocatoria urgente de un pleno extraordinario para que el alcalde, Rafa Ruiz, dé explicaciones sobre la situación generada.