Alcaldes y representantes de las Pitiusas con la presidenta Armengol, ayer, en el estand de Ibiza. | A. S.

La recuperación de otros destinos como Túnez, Turquía o Egipto, hundidos en los últimos años por su delicada situación sociopolítica, o la aparición de nuevos destinos emergentes no tendrá consecuencias en las Balears de cara a la próxima temporada, según señalaron ayer desde el Govern y el Consell d'Eivissa durante la primera jornada de la World Travel Market (WTM) que se celebra en Londres.

En el caso concreto de Ibiza, el director insular de Turismo, Vicent Torres Benet, la percepción actual es que la próxima temporada «irá en la misma línea que este año». «He podido tener reuniones previas a la WTM con importantes agencias del sector y las ventas se mantienen igual y las perspectivas son las mismas. También las programaciones aéreas se mantienen. Sabemos que hay mercados competidores que nos están haciendo la competencia, pero como destino consolidado pensamos que tendremos una temporada muy similar a la del 2017 en la que tampoco habrá crecimiento», aseguró Benet.

Calidad

En este sentido, coincidió con el vicepresidente del Govern y conseller balear de Turismo, Biel Barceló, quien recordó que, a pesar de que el año pasado ya se advirtió sobre la recuperación de otros destinos, finalmente no tuvo consecuencias sobre el sector. En el caso concreto del turismo británico, de enero a septiembre ha aumentado en un 2% respecto a 2016, a pesar también de la implantación del impuesto turístico. «Nosotros buscamos competir en precios, en calidad, en ofrecer un buen producto y con un destino muy consolidado. Bienvenida la recuperación de otros países porque las perspectivas para el año que viene son muy buenas», insistió.

Los principales competidores de Ibiza, según explicó, son en este momento Grecia, que el año que viene implanta su propio impuesto turístico, Croacia y Montenegro, a los que se añaden algunos países del norte de África que están intentando recuperar el segmento turístico que perdieron. Entre el sector hotelero existe una cierta preocupación por la recuperación de estos mercados, señaló el director insular de Turisme, quien, no obstante, considera que la apuesta debe ser por «el crecimiento en calidad, pero no en cantidad». «Apostamos por un turismo cada vez más sostenible. Nuestro territorio es limitado y apostamos por la calidad. Un turismo no de lujo sino respetuoso y que busca una actividad diferente», dijo Benet. De hecho, una de las apuestas del Consell d'Eivissa para esta WTM es el turismo wellness, que responde a un cambio en los hábitos del perfil del turista.

Ecotasa

Respecto a los efectos que tendrá la subida del impuesto turístico previsto por el Govern para la próxima temporada, Benet minimizó sus consecuencias y aseguró que, en sus primeros contactos con el sector, «el mercado alemán no ha dicho nada y el británico tampoco se ha pronunciado». «Vamos a ver en las próximas reuniones a ver cómo respiran», añadió.

Sobre la pasada temporada, Benet hizo un balance positivo y se refirió al aumento de casi un 10% del mercado británico durante 2017. No obstante, reconoció que ha sido «una temporada atípica» que comenzó antes de lo habitual y cuya recta final ha sido más buena que otros años. «Los empresarios dicen que, a nivel resultados, ha sido una temporada buena. Ha habido una apuesta por parte del sector empresarial de mejora de sus instalaciones, lo que hace que nuestra calidad suba y que nuestra competitividad sea cada vez mayor ante otros mercados», dijo.
El director insular de Turisme también habló de los precios que se han implantado esta pasada temporada en Ibiza y, en este sentido, recordó que «si queremos apostar por calidad y no por cantidad tiene que haber algún factor que haga esta depuración y el tema del precio es una depuración importante».

LA NOTA

Formentera apuesta por la especialización

La promoción turística de Formentera para la próxima temporada turística irá encaminada a sectores más especializados como, por ejemplo, el deportivo, según explicó ayer la consellera insular de Turisme de Formentera, Alejandra Ferrer.

En estos momentos, Formentera está negociando todavía el traspaso de las cantidades que recibirá el próximo año para realizar su propia promoción turística y que asciende a un millón de euros. Una cantidad que, según Ferrer, «está bien y es la que toca» y que el Consell estudia cómo invertirla para lograr su mayor rendimiento. En opinión de la consellera, la asistencia de Formentera a ferias de gran tamaño no resulta «rentable» para la menor de las Pitiusas, por lo que estudian diferentes opciones para dirigirse a mercados más especializados y que podrían pasar por la celebración de presentaciones, workshops o actividades alternativas en fechas diferentes a los grandes eventos de promoción turística.