Un grupo de turistas accede a un bajo comercial habilitado como piso en un bloque de viviendas en ses Figueretes.

El presidente del Consell d'Eivissa, Vicent Torres, admitió ayer por primera vez que la regulación del alquiler vacacional que pretende llevar a cabo el Govern balear no ayudará a reducir el precio de los alquileres en Eivissa. La problemática continuará, reconoce, mientras no se recupere para el alquiler residencial el importante volumen de pisos que actualmente se comercializan para turistas.

Cuestionado sobre si la legalización del sector puede ayudar a combatir este fenómeno, Vicent Torres muestra sus reservas y considera que el nuevo marco regulador que actualmente estudia el Ejecutivo balear «tiene que ser muy global desde el punto de vista del Instituto Balear de la Vivienda [Ibavi]». Aunque el Govern dejara en manos de los ayuntamientos y consells la planificación de dónde y cómo se pueden alquilar pisos a turistas, el presidente del Consell d'Eivissa considera que la parte turística «seguirá presionando mucho», alimentando como hasta ahora la especulación.

«No creo que los alquileres bajen mucho, pero allá donde podamos lucharemos para que toda esta vivienda que está en el canal turístico pase a la parte de alquiler residencial. Esto favorecería que hubiera al menos más oferta en el mercado, aunque el tema de los precios es un poco más delicado», explicó el líder socialista.

Noticias relacionadas

Fuga de trabajadores

Torres también se hizo eco de la noticia publicada ayer en este periódico sobre el éxodo de trabajadores y residentes que han perdido su vivienda o no encuentran alojamiento en la isla, víctimas de alquileres abusivos. El presidente de la máxima institución insular admite que «la presión turística» está causando «unos problemas fundamentales no sólo para esta gente que quiere venir aquí a trabajar y buscar una residencia, sino a gente que reside aquí permanentemente y que incluso teniendo trabajo le está costando encontrar una vivienda».

Torres precisa que el turismo «lo tenemos que ver siempre como una oportunidad, nunca como un problema», y considera que la campaña de inspecciones turísticas iniciada este mismo lunes por el Consell «quiere acotar este problema o al menos la parte turística para despejarla de este problema». Así, el jefe del Ejecutivo insular insiste en que el plan de choque dirigido a la parte turística de los alquileres «intentará erradicar de alguna manera los alquileres que se promocionan dentro de los canales turísticos», y avisa de que es necesaria una mayor «accesibilidad a la vivienda, sobre todo en la parte residencial».

Cabe recordar que el Consell d'Eivissa ha puesto en marcha una campaña masiva de inspección de alquileres turísticos. El departamento de Turisme analizará más de 4.500 viviendas de toda la isla que se comercializan a través de Internet e impondrá sanciones que pueden llegar a los 40.000 euros. Actualmente está prohibido el alquiler turístico en edificios plurifamiliares (bloques de pisos) o adosados sometidos al régimen de propiedad horizontal.