Una noche de póker

Torneos dedicados a los residentes de la isla aficionados al Póker, extranjeros y autóctonos, en una época del año en la que el entretenimiento se encuentra en sus niveles más bajos. «En Eivissa hay muchos seguidores de este juego que buscan reunirse y que demandaban una actividad más continuada». De hecho, anteriormente existían torneos mensuales, pero por primera vez, este invierno, se ha apostado por los encuentros semanales.

«De momento sólo llevamos tres viernes, pero la acogida ha sido muy buena». Y es que, si el aforo completo es de 90 personas, ya que juegan 10 por cada una de las 9 mesas, normalmente se llena la sala o, como poco, se mantiene una ocupación de 80 asistentes. Además, cada semana la inscripción cuesta un precio diferente, para que sea una liga adaptada a todos los bolsillos. El primer viernes fueron 100 euros, el segundo 80 y las dos semanas restantes 40. «El torneo de 100 euros es para los más capacitados, mientras que hay otras personas que prefieren jugarse menos, la cosa es pensar un torneo donde pueda participar todo el mundo».

De esta manera se da comienzo una partida multimesa donde los jugadores, siguiendo las mismas reglas, apuestan sus puntos y se van eliminando. Este proceso puede prolongarse hasta siete u ocho horas, e incluso posponerse la mano final para la noche siguiente. «Los 10 últimos serán los finalistas que quedan agrupados en la última mesa», y entre ellos más de uno sale premiado, porque normalmente se premia al 10% de los jugadores que participan, de acuerdo a los porcentajes estipulados. Claro que siempre se reserva un 5%, de lo recaudado en las inscripciones, para el premio final de la liga.

Premio de mayo

Y es que, además, del torneo semanal que se juega, todos tienen sus miras puestas en el mes de mayo, cuando la liga finalice y se repartan los grandes premios relacionados siempre con el Póker. Así, el primero en el ránking se llevará un viaje con estancia en el Hotel Estrella de Barcelona y participación en el torneo más grande de España. «Por eso, cuantos más viernes se juegue más puntos acumulas de cara a la gran final», apunta Juanma Munar, uno de los responsables de torneo. Él, junto a su compañero José Guasch, se encarga de coordinar a los crupiers y de repartir los puestos aleatoriamente para ver dónde se sienta cada jugador. «Si hay algún problema somos los que tenemos que solucionarlo y muchas veces dar una segunda opinión. Hay gente que sabe jugar pero desconoce las reglas del casino».

Aunque si hay una ficha imprescindible aquí, esos son los jugadores, entre los que la presencia masculina es aplastante frente a un 5% de mujeres. Hablamos con uno de ellos, Guillermo Punzano, de 24 años, que a pesar de su juventud lleva ya seis jugando al póker y nos desvela sus trucos. «Para empezar es importante conocer las reglas básicas y aprender sin jugarte dinero». Nos indica que hay que dedicarle tiempo y que si no se siguen unos pasos te cansas o lo dejas. «Toda la información está en internet, de ahí puedes aprenderlo todo. Luego, cuando vas cogiendo confianza en ti mismo puedes comenzar a apostar y a jugar en vivo». Lleva desde los 18 años jugando, pero distingue bien la gente que tiene o no experiencia, en los gestos faciales, tics, temblor de manos… «Este es un juego en el que tienes que controlar de matemáticas, no es un juego de azar, se basa en la psicología y en saber calcular posibilidades y anticiparte a las jugadas. Cuando tienes práctica los movimientos salen automáticos».