Imagen de una boca de riego reventada por unos niños en el barrio de sa Penya. Fotos: FACEBOOK, SALVEM SA PENYA
Los vecinos y propietarios de las viviendas de sa Penya han visto esta temporada agravado un problema que, según explicaron, llevan viviendo desde hace unos 20 años. Se trata de la falta de presión o incluso nula presencia de agua en los grifos de sus casas debido a que quienes residen de manera ilegal en las casas de sa Penya, es decir, los okupas revientan las bocas de riego municipales generando así un despilfarro que provoca que se pierdan «litros y litros de agua» por calles como la Alt y que disminuya la presión de salida del agua en las casas. Los vecinos se quejan de que, pese a la falta de suministro normal en las casas, la concesionaria del agua «sigue cobrando sus facturas».
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A veces no parecemos muy normales. El patrimonio del casco antiguo y otras zonas protegidas es lo que hace que Ibiza sea la Ibiza que es. A veces creo que los gobernantes pretenden que la Ibiza de la que quieren sentirse orgullosos es la de la juerga. Si algo tenemos para enseñar al mundo, es la espectacular panorámica de Dalt Vila y Sa Penya, un conjunto que muchos quisieran tener. Cuando se haya convertido en un pelotón de ruinas, nos arrepentiremos. En tanto continuamos espectantes y pasivos contemplando la debacle.