Humor para darle una vuelta al matrimonio

La historia gira en torno a dos matrimonios que son amigos desde hace más de 20 años y que se van juntos de vacaciones. Todo va a la perfección hasta que una noche, después de unas copas de más, una de las mujeres desvela el incidente que provocó la elección de las parejas. A partir de este momento comienzan a aflorar secretos que desembocan en situaciones que han hecho partirse de risa a miles de espectadores, tanto en su primera versión en catalán, que se estrenó en 2008, como en la nueva, que ha podido verse en el Teatro Infanta Isabel de Madrid desde el 3 de octubre al 4 de enero. «Se trata de una comedia muy especial que huye del concepto de vodevil clásico y que cuenta de modo cercano situaciones que podrían pasarle a cualquier matrimonio español de mediana edad que parece que tiene una vida perfecta y totalmente organizada después de 25 años de convivencia», explica Francesc Albiol, uno de los protagonistas.

Cercanía y complicidad

Precisamente el actor catalán destaca que esta cercanía puede que sea parte de la clave del éxito que ha tenido la obra. «El espectador nos ve sobre el escenario y no se siente ajeno a lo que pasa porque al igual que les sucede a los personajes también se pregunta una serie de cosas desde su butaca y eso es algo que sólo consigue un genio como Jordi Galcerán, uno de los más prolíficos escritores de obras de teatro en España», resume Albiol.

Además, este actor nacido en Barcelona en 1957 asegura que juega un papel muy importante la química que que existe entre los cuatro miembros del reparto. «El guión exigue mucha complicidad entre María, Aurora, Vicente y yo para que salga perfecto y la verdad es que hemos tenido la suerte de llevarnos fenómenal entre nosotros casi desde el primer ensayo».

Por todo ello, Albiol anima a todos los ibicencos a acercarse hasta Can Ventosa en la sesión de hoy a las 21,30 horas y en la de mañana a las 20,30 horas. «Que no se lo piensen dos veces y no pierdan la oportunidad de disfrutar del teatro, una forma de expresión única y mágica en la que el espectador siempre es testigo de una función única e irrepetible», concluyó.