C. Roig25/01/14 0:00
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En el Ayuntamiento de Santa Eulària todavía no tienen una idea muy formada sobre si la pista de ultraligeros que se proyecta instalar en su municipio puede ser beneficiosa o perjudicial. Según explicó el concejal de Urbanismo, Mariano Juan, por ahora no han recibido ninguna queja de los vecinos, pero están un poco «a la expectativa» de la opinión que se pueda generar entre los habitantes del municipio. «El Ayuntamiento no irá en contra de los vecinos», indicó Juan, que considera que en realidad el proyecto tiene una afección «mínima» porque se trata de una pista de tierra y no se tiene que efectuar ninguna obra. De hecho, el presupuesto es «bajísimo». Lo que más les preocupa es que pueda generar ruido o algún tipo de molestia. «En realidad no son ni avionetas y parece que no hacen mucho ruido, pero se tendrán que hacer unos estudios acústicos», señaló Juan, que recordó que, en todo caso, será el Consell el que decida si permite o no el proyecto mediante una declaración de interés general. Una vez se produzca esta autorización el Ayuntamiento sí que podrá poner sus «condiciones» al conceder la licencia de actividad. De todas formas, remarcó que estarán «muy atentos» a las alegaciones que se puedan presentar por parte de los afectados.

Preguntado por si esta instalación podría tener beneficios para el municipio, el concejal relató que los promotores hablan de que hay un segmento de mercado turístico muy importante al que le interesan este tipo de actividades. «En Mallorca tiene una cierta implantación y aporta turismo; eso es lo que defienden ellos», remarcó el regidor, que explicó también que esta zona se ha utilizado siempre como pista de ultraligeros desde hace «20 o 30 años». De hecho, matizó que ya existe allí una especie de pista y lo único que se quiere es acondicionar el terreno, que está cerca del río de Santa Eulària, y «recuperar la actividad».

La definición de ultraligero es la de un avión que no tiene más de dos asientos y un peso máximo de despegue de entre 300 kilos y 495 kg. La pista se quiere habilitar a 2,5 kilómetros al oeste de Santa Eulària. Se contempla la afectación de 14.806 metros cuadrados de suelo rústico común y suelo rústico protegido. Consiste en una pista de vuelo, una calle de rodadura, una plataforma de estacionamiento, salvamento y extinción de incendios y un aparcamiento de vehículos.