El conseller d’Economia, Alex Minchiotti, durante el debate que protagonizó con la consellera Patricia Abascal sobre las cuentas de la institución. | (c) Sergio G. Canizares

El Consell quiere acabar de una vez por todas con el déficit que le genera la gestión de las residencias y ayer introdujo por la vía de urgencia un nuevo punto en el orden del día mediante el cual se aprobaron los nuevos estatutos de un consorcio balear y la disolución del organismo que hasta ahora gestionaba estos servicios en Eivissa. De esta forma, el Consorci de Serveis Socials i Sociosanitaris de les Illes Balears sustituirá al Consorci de Gestió Sociosanitària d’Eivissa.

Según explicó el presidente, Vicent Serra, la dependencia es una competencia «enteramente del Govern» y es «absurdo» lo que se hacía hasta ahora, ya que el dinero llegaba a la institución insular mediante convenio para pasarla al consorcio, lo que provocaba que cuando había déficit lo tenía que asumir el Consell d’Eivissa.

Serra aseguró que no está encima de la mesa ningún tipo de cambio para los 150 trabajadores del consorcio y anunció que el resto de servicios que lleva a cabo este organismo, como por ejemplo el CEPCA, saldrán a concurso para que sean empresas las que los gestionen. «Esto siempre se ha hecho de forma externa, en el CEPCA nunca ha habido plantilla del Consell porque además la ley nos impide ofertar plazas nuevas», aclaró el presidente, que indicó que la parte de dependencia del hospital residencia Cas Serres también entra en este consorcio, aunque el control final sea del Consell.