Imagen de archivo del bar Es Puig donde supuestamente se hicieron obras sin licencia, según PSOE-Pacte.

El concejal de Deportes de Sant Antoni, Vicente Cabezas, informó ayer a través de un comunicado de que renuncia a la licencia de obra mayor que solicitó para ampliar su bar, que fue aprobada en junta de gobierno el pasado 29 de junio. «Ante la polémica que se ha generado no puedo permitir que se produzcan más especulaciones y falsas acusaciones tanto sobre mi persona como sobre el equipo de gobierno, a pesar de tener la total seguridad de que el procedimiento para la concesión de la licencia se ajustaba a la más estricta legalidad», expresó el titular de Deportes en el comunicado escrito.

Dimisión

Quienes siempre han tenido claro que la licencia era ilegal son los miembros de PSOE-Pacte en el Ayuntamiento de Sant Antoni: «Tenemos muy claro que la licencia es ilegal; hacen urbanismo y leyes a la carta. Mantuvieron que la licencia es legal y esto es imposible porque tenían un expediente urbanístico desde 2007 y se le había denegado en cuatro o cinco ocasiones previamente», expreso Pep Marí Marge, portavoz de PSOE-Pacte en el consistorio portmanyí. Por ello piden la dimisión no sólo de Cabezas sino también del titular de Urbanismo; José Torres, responsable de la concesión. «Pedimos que se vayan porque nos han engañado como oposición y sobre todo han engañado a los ciudadanos», matizó Marge, quien afirmó que el viernes pusieron en conocimiento los hechos en Fiscalía porque «el problema» es que la obra «ya está hecha». «Nos han dicho que quizá no lo estudien porque ha retirado la licencia, pero intentaré tener una entrevista con el Fiscal», precisó Marge.

Cabe destacar que la semana pasada la alcaldesa de Sant Antoni, Pepita Gutiérrez, y el titular de Urbanismo, José Torres, afirmaron públicamente que esta licencia era legal y regular y que pedirían asesoramiento jurídico al Consell para dirimir las diferencias entre el informe del técnico y del secretario. Días después, Torres precisó que no sabía si pedirían ayuda a la máxima institución insular o bien pedirían informes externos.