Miquel fue el encargado de encender la ‘sitja’ que organizaron en el Pla de Corona.

Santa Agnès vivió ayer un regreso a mediados del siglo XX con la fiesta pagesa de la encendida de su sitja organizada por la Asociación de Padres del colegio de la localidad, la asociación de vecinos y los mayores del pueblo.

Tras tenerse que suspender en el mes de febrero por el mal tiempo, esta vez la lluvia se apiadó de todos los voluntarios, permitiendo que el lugar se convirtiera un año más en una homenaje a la tradición.

Así, en los terrenos de Toni Boned no faltaba de nada, desde el tradicional café caleta hasta herramientas de antaño usadas para cortar los pinos y las carrascas y trasladarlas por los bosques, bicicletas, motos y tractores con más de sesenta años de antigüedad, o el tradicional juego de la rana.

Tampoco faltó el horno de pan, donde según Boned, uno de los precursores de la iniciativa, estaba previsto que se cocinara este alimento al modo ‘pagès’: «Usando leña y masa con trigo de Eivissa, amasando la masa con las manos, y sobre todo poniéndole mucho cariño y mucha ilusión».

Precisamente la ilusión fue una de las grandes protagonistas durante el encendido de esta sitja, construida de igual manera que las que se hacían antiguamente para fabricar carbón.

El encendido

Los encargados de prender fuego para que arrancara fueron Miquel, uno de los veteranos de la zona con muchos encendidos a sus espaldas, y la alcaldesa de Sant Antoni, Pepita Gutiérrez, que se sumó a la idea ante la sorpresa de algunos de los presentes.

«Estoy muy contenta de asistir a esta actividad, que es muy querida por todos los vecinos de todo el municipio y por contemplar de primera mano el gran trabajo que hacen los vecinos por intentar difundir estas tradiciones que para muchos otros habitantes que viven en la ciudad es totalmente desconocida», aseguraba la propia Gutiérrez tras hacer un par de fotografías de la fiesta con su teléfono móvil.

Precisamente estos aparatos, junto al equipo de música donde sonaba el grupo Ressonadors y los coches aparcados en la zona, son de los pocos vestigios que nos recuerdan que estamos en el siglo XXI en esta fiesta que se prolongará en Santa Agnès durante todo el fin de semana.

El apunte

Mateu, Lara, Mara, Rafel, Toni, Liva, Marc, Noa, Andreu son sólo algunos de los niños del colegio de Santa Agnès que pasarán el fin de semana acampados en una gran tienda de campaña roja en el lugar donde se encendió la ‘sitja’ y se hará la fiesta pagesa. Para muchos de ellos ya no hay secretos en el encendido y aseguran que se lo pasan en grande jugando con sus amigos.