Alcaraz critica el aumento de las tasas del servicio de atención domiciliaria

El presidente del PP de Formentera, José Manuel Alcaraz, anunció que hoy viernes en el pleno ordinario del Consell «votaremos en contra de la subida que el PSOE y GxF quieren aprobar de un 30 por ciento en el servicio de las personas que reciben atención domiciliaria, y paralelamente además reducen las bonificaciones a las que tenían derecho las personas con menos recursos, porque son medidas que hace la izquierda y que -destacó Alcaraz-, son totalmente antisociales».
A tenor de los datos difundidos por el PP, en la actualidad son 24 las personas que reciben este servicio por parte de la Conselleria de Benestar Social, dirigida por el PSOE. Además, 9 de esos usuarios deben recibir la atención por parte de 2 trabajadores sociales por lo que el precio a pagar por estas personas será mucho mayor.
Alcaraz añadió que se trata de «una medida adoptada por parte del equipo de gobierno, aumentar todas las tasas como han hecho en los últimos plenos cuando el pasado año decían que se congelaban las tasas porque la economía de Formentera estaba bien».
Para el PP eso significa que antes de las elecciones congelaron la subida de las tasa como medida totalmente electoralista y «ahora al no haber sabido gestionar la herencia que recibieron de un financiamiento extraordinario para crear el Consell, una financiación mejor que el de cualquier ayuntamiento o consell insular y como no han sido incapaces de gestionarlo de forma adecuada ahora han de subir de forma brutal las tasas».
Alcaraz dijo que el Consell se está caracterizando por emprender «medidas antisociales, con subidas de tasas desproporcionadas», apuntó que en algunos casos como en las tasas por el uso de la piscina se están recabando firmas para impedir aumentos fuera de toda lógica y recordó que hace dos meses «el equipo de gobierno ya decidió reducir la bonificación del 90% al 50% del IBI que debían pagar las familias numerosas, dentro del paquete de aumento de todas las ordenanzas fiscales que se produjo con la aprobación de los presupuestos para 2012» dentro de una línea de actuación que va en contra de los ciudadanos, en especial los que tienen menos recursos.