Dicen los expertos que la técnica fotográfica del time lapse consiste «en la captación de fotografías fijas para después ser reproducidas a una velocidad mayor a la que fueron tomadas creando una ilusión de imágenes aceleradas». Algo de lo que sabe, y mucho, el fotógrafo ibicenco Alejandro Iborra Ventura, uno de los mayores expertos en este campo de toda España.
«Yo me dedicaba a la fotografía de manera profesional pero tras ver el primer vídeo que hizo Tom Lowe sobre un time lapse nocturno descubrí lo que ahora es mi pasión», asegura Iborra mientras coloca su cámara frente a la iglesia de Sant Carles.
No en vano Lowe es considerado por muchos como el gurú de esta técnica, ya que, como asegura Iborra, «hace tres o cuatro años revolucionó este mundo con un corto en el que se podía ver en movimiento las estrellas y la vía láctea, consiguiendo, además, que muchos aficionados se animaran a probar el time lapse».
Uno de ellos fue este fotógrafo ibicenco, cuyo trabajo se puede ver en el blog ibizatimelapses.blogspot.com y que impartirá un curso el sábado en el Ibiza Photo Club de ocho horas. Sin embargo, su trabajo no es nada fácil y requiere de mucha paciencia y vocación, ya que, por ejemplo, este experto en naturaleza es capaz «de acudir a los lugares más alejados de la Isla para estar ocho horas por la noche y a varios grados bajo cero para sacar cuatro o cinco cortes aprovechables».
Algo que hace siempre cargado con un rail motorizado controlado por un ordenador en el que programa en su cámara de fotos el tiempo de disparo y de movimiento y que también es capaz de hacer que ésta tenga un desplazamiento vertical y horizontal. «Hay veces que cuando llego con todo mi equipo a un lugar apartado donde hay poca gente y me ven quieto esperando durante horas mientras mi máquina sube por un rail, muchos piensan que estoy loco», asegura Iborra con una gran sonrisa.
Aún así, este experto en time lapse afirma que cualquier aficionado a la fotografía puede empezar en este campo, «si se tiene una buena cámara de fotos, un buen trípode, un disparador y un buen programa de edición de vídeo».
Además, a todo esto también ayuda que Eivissa es un lugar ideal para llevar a cabo esta práctica con lugares que, según Iborra, son la envidia de muchos aficionados de la Península como es Figueral, Aiguas Blancas o es Vedrà.
Sin embargo, el time lapse no sólo se limita a captar imágenes de paisajes ya que también hay grandes creaciones que recogen el paso del tiempo en ciudades y edificios. En este sentido, según el fotógrafo ibicenco, «Luis Caldevilla es uno de los mejores exponentes españoles que hay en este campo, gracias a montajes espectaculares de la Gran Vía o el Rastro madrileños, el Maratón de la capital, o aquellos en los que recoge las construcciones de edificios».
Algo que demuestra que, aunque es complicado, se puede vivir con el time lapse. De momento Alejandro Iborra, ya está trabajando para una productora que se llama Timelapse.tv, especializada en vídeos para el tiempo de la cadena de televisión Antena 3 y sus trabajos son sencillamente espectaculares.
Todo a punto para la secuencia perfecta
Primer paso. Alejandro Iborra coloca sobre su rail motorizado su máquina de fotos con sumo cuidado para que esta no se mueva lo más mínimo a la hora de moverse.
Segundo paso. Tras poner la cámara, Alejandro comprueba que el giro funcione y que a la hora de subir por el rail no dé ningún salto que eche abajo el trabajo realizado.
Tercer paso. El fotógrafo programa en un pequeño ordenador aherido al rail la apertura del obturador y el tiempo de disparo y de movimiento que realizará la cámara.
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