Imagen de la zona donde se prevé desarrollar el aparcamiento de pago. | Irene G.Ruiz

Los propietarios de la UA13 des Pratet han solicitado al Ayuntamiento de Vila acondicionar la zona para crear un aparcamiento de pago con capacidad para 1.100 vehículos, según ha podido saber este periódico.

El concejal popular del Ayuntamiento Antoni Prats preguntó por esta cuestión al concejal de Obras, Vicent Torres, durante la sesión plenaria de ayer. Torres señaló que se está realizando la memoria justificativa aunque aseguró que «no existe ninguna cuestión técnica que impida los aparcamientos en la zona», debido a que se trata, según fuentes del Ayuntamiento, de una actividad temporal. En este sentido, desde el Consistorio apuntan que esta iniciativa sería beneficiosa para la ciudad.

Al parecer, los propietarios de la UA13 podrán hacer uso del solar como tal hasta que se construya el aparcamiento subterráneo previsto o, bien, hasta que se desarrolle el plan parcial de esta unidad de actuación. La propiedad privada será la encargada de acondicionar el aparcamiento que según algunas fuentes señalan podría estar listo antes de este mismo verano. Y es que las obras que se deben cometer hacen referencia al asfaltado de la zona y alumbrado.

Declaración de intenciones

El pleno del Ayuntamiento de Vila aprobó ayer de forma inicial, con la abstención del Partido Popular, el convenio de colaboración entre el Consistorio y la entidad pública empresarial del suelo, Sepes, dependiente del Ministerio de Vivienda, para que ésta última asuma la urbanización y el desarrollo del sector 12, Can Escandell, así como la ejecución de la zona verde, que ocupará unos 100.000 metros cuadrados.

La portavoz del Partido Popular, Virtudes Marí, apuntó que en ningún caso el trabajo a desarrollar por Sepes es «un regalo», ya que el Ayuntamiento «se deshace de un terreno y ellos después le sacarán el dinero como puedan, se trata de una permuta».

Asimismo, Marí desconfió de la construcción de esta gran zona verde así como de las más de 400 VPO previstas ya que el plan parcial de Can Escandell «no se podrá aprobar hasta que no estén hechas ni la depuradora ni la desaladora», y calificó el anuncio de ser una «declaración de intenciones». Además, apuntó que desde el PP no consideran que la gran concentración de viviendas de protección oficial en este sector no es «muy positivo, ni lo mejor».

El concejal de Vivienda, Marc Costa, recordó que con este convenio se consiguen dos objetivos importantes para el Ayuntamiento, uno el de seguir trabajando en políticas de viviendas y permitir que más de 400 familias puedan disfrutar de una vivienda asequible, y, por otro lado, desarrollar la parque de Can Escandell.

El leguaje «rastrero» del PP y el «oscurantismo» de Vila

El concejal popular Jaime Díaz Entresotos presentó a la sesión plenaria una moción con propuesta de acuerdo para que el Ayuntamiento asuma la gestión de la empresa concesionaria de la zona azul y que la cuenta bancaria existente se ponga a nombre del Consistorio y no de Park Control. En este sentido, Díaz criticó que desde el principio de la gestión de la zona azul se han registrado numerosas irregularidades, entre las que enumeró, once en total, se encuentra la compensación de la deuda entre las tres concesiones existentes y lo calificó como «tratos de favor». Asimismo, apuntó que el Ayuntamiento está cayendo en un «oscurantismo» a la hora de dirigir la administración y apuntó que el gerente de la empresa «es un cargo de confianza y, según dicen en la calle, han pasado muchos familiares de políticos».

El teniente de alcalde, Santiago Pizarró, instó al PP a acudir a los tribunales para presentar todas las irregularidades que consideren. Pizarró criticó el lenguaje «rastrero y barrio bajero» de Díaz y apuntó que deberá ser el Consell Consultiu quien decida quien tiene la razón «pero entre su opinión y la de los servicios jurídicos del Ayuntamiento, me quedo con estos últimos».