La Conselleria d'Obres Públiques del Govern balear todavía no ha conseguido presupuesto para colocar las pasarelas para peatones que tiene previsto construir en la rotonda de sa Blanca Dona y en Can Guillamó. Según explicó el director general d'Obres Públiques, Antoni Armengol, todavía no tienen fecha de inicio de las obras porque están pendientes de que se dote económicamente el modificado de la autovía, ya que actualmente «los contratos están agotados y hasta que no se dote no se puede exigir que se haga».

Este responsable del Govern explicó que justo ha coincidido con un «momento malo» porque la crisis económica provoca que haya «recortes por todas partes». De todas formas, indicó que las pasarelas se acabarán haciendo porque son necesarias y en su día adquirieron el compromiso de construirlas.

El problema es que el Ejecutivo autonómico se ha ido poniendo al día en los pagos de obra hecha, de los trabajos que se encontraron cuando entraron a gobernar y que «se habían hecho sin aprobación ni contrato previo». Sin embargo, no ocurre lo mismo con las cosas nuevas «si no están respaldadas por una dotación económica, a no ser que sean urgentísimas por ser una emergencia para la seguridad».

Diseño consensuado

Armengol explicó que la pasarela de Blanca Dona se intentará consensuar en cuanto a diseño para que no quede mal, ya que se trata de un terreno muy elevado. «Ahí hay un cruce de peatones que asusta porque pasan muchos jóvenes y estudiantes para ir clase y es muy necesario; yo he estado allí en las horas punta y los chicos van hablando, van a lo suyo, y hay muchos coches; será un puente muy útil, muy utilizado», explicó el director.

La zona entre Eivissa y sa Blanca Dona está muy transitada por haber en la zona varios centros educativos y las piscinas de es Raspallar. Durante el curso son cientos los jóvenes que caminan por esta zona y que tienen que cruzar por la rotonda de sa Blanca Dona, una zona de mucho tráfico y donde recientemente el Govern ha construido los 'carriles cero' para que los coches puedan acceder directamente a Eivissa cuando vienen del aeropuerto o a Sant Antoni cuando vienen desde Santa Eulària.

La construcción de estas pasarelas es algo demandado también por los vecinos de Can Guillemó, cerca de la entrada de Sant Antoni. En este punto también hay numerosas casas y negocios a un lado y a otro de la carretera que necesitan ser intercomunicados con un puente.

Desde el mes de julio se está redactando la auditoría de las autovías y uno de los primeros informes que tiene que presentar la empresa es sobre la conveniencia técnica de construir la ronda sur de Sant Antoni. Desde el Govern aseguran que este informe estará a finales de mes y, según explicó Armengol, se tomará la decisión que diga la auditoria ya que siempre han dicho que la decisión será «puramente técnica» para ver si se puede construir o no. El director general d'Obres Públiques también destacó que la empresa adjudicataria está redactando la auditoría de «forma totalmente independiente».