Nombres: Ruth y Carlos

Playa: Cala Pada Lo mejor: El agua está muy limpia Lo peor: Demasiado tranquila

Esta pareja de Cáceres pasa sus primeras vacaciones en Eivissa, donde aprovechan para visitar sus numerosas y preciosas calas. Entre sus preferidas se encuentra Cala Pada, ubicada a medio camino entre Santa Eulària y es Canar justo antes de llegar al cruce para acceder a S'Argamassa y Punta Arabí. «Los accesos por coche y autobús son muy buenos porque hay párking de sobra y la parada de autobús está a cinco minutos de la playa», cuenta Esther. Ambos coinciden en afirmar que lo mejor de esta calita de la Villa del Río es que tiene muy buenos servicios: «Las hamacas son muy baratas (el alquiler para todo el día cuesta 3'50 céntimos de euro) y además tiene muy buenos servicios. Las duchas están limpias, hay baños y muchos chiringuitos a pie de playa para poder tomar algo o comer», afirma Carlos, quien señala que han llegado a pagar diez euros por una hamaca en una de las playas más conocidas de la isla por su ambiente festivo. Como punto negativo destacan que el ambiente es demasiado familiar: «Si vienen muy a menudo, como nosotros, siempre acabas viendo a familias; es una playa muy de padres y niños. Quizá le falta algo más de ambiente de gente joven, pero aún así nos encanta», explica la joven.

María José y Àngela Real