La ministra de Vivienda, Beatriz Corredor, visitó ayer la isla para anunciar una inversión de 16 millones de euros para el municipio de Eivissa, que se destinarán a la rehabilitación de sa Peixateria y el Mercat Vell, y a la urbanización de los terrenos municipales de Ca n'Escandell, donde se construirán más de 400 viviendas de protección oficial (VPO) y un gran parque público.

El compromiso del Estado con ambos proyectos quedó sellado mediante la firma de dos protocolos entre la alcaldesa Lurdes Costa, la ministra y el presidente de la Entidad Estatal del Suelo (Sepes), Marcos Vaquer. El primero es el compromiso del Ministerio de asumir la rehabilitación integral de los mercados por un valor de hasta cinco millones de euros, y el segundo indica que Sepes ejecutará por un valor de once millones las obras de urbanización de los 173.000 m2 de terreno público de Ca n'Escandell, para adecuarlos para la futura edificación de las dos promociones de VPO y del parque.

Corredor aseguró que su «ministerio es el más social de los departamentos económicos del Gobierno» y destacó que los dos proyectos que se desarrollarán en Vila «tienen las ambas características». «Por una parte vamos a rehabilitar el Mercat Vell y sa Peixateria, y ésta es la parte económica, la de conseguir que se renueven los cascos de las ciudades y los pueblos para que sea la sostenibilidad urbana lo que caracterice al sector de la construcción en los próximos años», destacó la ministra. «Y desde el punto de vista social, el protocolo que va a permitir hacer una actuación muy importante en Ca n'Escandell», agregó.

Para la ministra, estas dos actuaciones no sólo ayudarán a «mejorar la vida de los ibicencos» sino que también «revitarlizarán el comercio, ayudarán a que el turismo se encuentre más a gusto y a que todos los vecinos puedan venir a comprar tranquilamente a los mercados», concluyó.

El acuerdo firmado por Sepes para Ca n'Escandell establece que el Ayuntamiento promoverá y Sepes ejecutará una actuación urbanística sobre los terrenos. Para ello, el Consistorio cederá gratuitamente este suelo de titularidad municipal, libre de cargas, gravámenes, arrendamientos y ocupantes. Sepes, por su parte, ejecutará las obras de urbanización para preparar el suelo donde se edificarán las viviendas.

La alcaldesa Lurdes Costa aseguró ayer que el Consistorio está «en condiciones para sacar a concurso la redacción de los proyectos» que permitirán revitalizar los mercados que se destinarán a la venta de productos frescos y delicatessen. En este sentido, Costa recordó «la necesidad de revitalizar los barrios de la Marina y de sa Penya, y toda la línea del puerto» y explicó que «no se puede revitalizar una zona si no se pone a disposición de los vecinos la oportunidad de seguir comprando los productos de primera necesidad». «Queremos que los vecinos que viven en La Marina puedan seguir disponiendo de este Mercat Vell, de poder comprar las verduras, frutas y flores frescas al lado de sus casas y también de sa Peixteria, que se pretende incorporar con puestos de carne, pescado y lácteos», agregó Costa, quien agradeció a la ministra la aportación y destacó «lo sencillo que fue recibir la colaboración» del Ministerio. Asimismo, Costa indicó que «hay sintonía en la necesidad de que se respete la catalogación de ambos edificios» durante las obras de remodelación, tanto el Mercat Vell que es un Bien de Interés Cultural (BIC) como de sa Peixateria, que es un Bien Catalogado (B.C).

Por último, la alcaldesa destacó que ambos proyectos tienen una futura rentabilidad económica, que ya fue estudiada por la empresa pública Mercasa, encargada de presentar al Ministerio de Vivienda ambos mercados para obtener así la financiación para su rehabilitación.

La ministra Beatriz Corredor afirmó que el Ministerio «trabaja para que todos los ciudadanos puedan acceder a una vivienda pero también para lograr un desarrollo económico más sostenible y duradero que genere empleo, gracias a la rehabilitación y a la vivienda protegida». Asimismo, destacó que «en los últimos cinco años se han dado ayudas a a 20.000 familias en les Illes Balears» mediante planes de vivienda y que en los próximos cuatro años las ayudas alcanzarán a «18.000 familias más». «El único sentido que tiene la política de Estado es a través de la micropolítica, para que cada uno de los vecinos que reciban ayudas para acceder a la vivienda o al alquiler», concluyó Corredor.