El año ha comenzado con malas noticias en lo que respecta a la demanda del transporte aéreo en las Pitiüses. La crisis está recortando los traslados por avión de los residentes en las Islas, al tiempo que disuade a quienes tienen intención de venir a Eivissa y Formentera. El recorte generalizado de las tasas de combustible no ha impedido que en los dos primeros meses del año ya se haya producido un descenso en el número de pasajeros que han pasado por es Codolar. En concreto, se ha pasado de casi 209.200 viajeros entre enero y febrero del pasado año a sólo 187.700, unos 21.500 menos.

La reducción del 10,3% en el cómputo total contrasta con el aumento espectacular del pasaje extranjero, que se ha multiplicado por cuatro respecto al pasado año. Si en los dos primeros meses de 2008 los viajeros no españoles a penas superaban los 3.800, en el mismo periodo de este ejercicio han rebasado los 16.200.

El aumento ha sido especialmente significativo en cuanto a ciudadanos de Reino Unido y de Italia, una evolución quizás motivada por la apertura de rutas de bajo coste en temporada baja con ambos países. La evolución del mercado británico ha supuesto que se haya pasado de sólo 75 pasajeros a más de 7.000. En el caso de los transalpinos, entre enero y febrero se han rozado los 5.000 pasajeros en contraposición de los dos centenares del mismo periodo del año pasado.

Menos españoles

En sentido contrario, el pasaje español se ha precipitado desde los casi 206.000 viajeros en 2008 hasta los cerca de 171.300 en el presente ejercicio, un descenso condicionado por el deterioro de la situación económica de los residentes en las Pitiüses.

El esquema de crecimiento en los países donde se han introducido nuevas rutas se repite en el caso concreto de los aeropuertos con que se ha iniciado la operación y que son los únicos que experimentan incrementos considerables en su actividad. En el resto, la caída es generalizada, afectando de forma especial a los principales destinos conectados con las Pitiüses. Así, El Prat se mantiene en el primer lugar de pasaje aunque haya perdido más de 15.000 pasajeros (58.700 frente a 73.150). Barajas también ha caído fuertemente, tras pasar de 55.000 viajeros a 41.800. Palma es el destino primario que registra un descenso más moderado al pasar de 55.000 a 50.000.

El descenso en la ocupación se reproduce en todas las principales líneas que trabajan en invierno con Eivissa aunque son Spanair y Clickair las más perjudicadas al perder un tercio de sus clientes respecto al periodo enero-febrero de 2008.

La primera sigue siendo la tercera aerolínea por importancia pero cae hasta menos de 24.000 viajeros, cuando el año pasado llegaba hasta los 34.000. En el caso de la bajo coste de Iberia, la reducción le ha supuesto pasar de 29.500 usuarios el pasado año a los 20.000 del presente ejercicio.

Air Nostrum mantiene el liderato con 63.000 clientes, 5.000 menos que hace un año.