-Como buen navegante que es, ¿cuáles son los principales problemas que encuentra para desarrollar esta actividad?

-Primero que no hay amarres suficientes para tanta afición y son los mismos que hace 25 años. También me parece horrible que vengan desde el extranjero barcos a pasar todo el verano y nosotros que pagamos impuestos aquí tengamos el mismo trato y ninguna preferencia.

-¿Qué puerto de la isla está mejor preparado?

-Ninguno, me parece que el puerto de Eivissa es un caos, el de Sant Antoni también y el de Santa Eulària, quizás sea el que está mejor encuadrado en el panorama de la isla. Habría que hacer algún esfuerzo y a costa de sacrificar algo darle un poco de cancha a la afición al mar, porque hay gente que no puede comprarse un barco porque no tiene donde ponerlo. Además, las empresas que tienen amarres piden locuras para poder tener una estacha y agarrar el barco.

-Autoritat Portuària proyecta la reforma del puerto de Eivissa...

-No sé como será porque hasta que no lo vea... Pero sí hace falta un arreglo importantísimo aunque tampoco creo que sea la solución definitiva. No veo en el puerto de Eivissa el tráfico de pasajeros, de carga, de combustibles y todo esto compaginado con la manía deportiva. Se necesita otra alternativa y creo que habría otra solución que estaría bien...

-¿Qué propone?

-Como con la autopista se han cargado una buena parte de la isla, y cerca del aeropuerto está todo lleno de naves y negocios, estaría bien seguir la autopista unos 500 metros más y hacer un puerto comercial después del límite de Ses Salines. Es una opinión personal pero creo que descargaría al puerto de Eivissa.

-Usted vive en Sant Francesc, ¿cómo lo encuentra?

-Los contenedores de basura son un desastre, estando en pleno corazón del Parque de Ses Salines. También están los restos del delfinario, que lleva cinco o seis años abandonadísimo. Lo que sí me ha gustado es que hayan arreglado la iglesia de Sant Francesc.

-¿Dónde va cuando quiere ver algo cultural?

-Bueno, éste es otro aspecto porque también hay una falta tremenda de posibilidades de que la cultura llegue a Eivissa. Yo viajo mucho, y si hay algo que me interesa, voy a Madrid o Barcelona.