BÀRBARA MUNAR

El sindicato UGT pedirá una reunión urgente con el conseller de Desenvolupament empresarial, Joan Serra Cardona, para saber «la aplicación técnica de los cierres» de los establecimientos hoteleros Mare Nostrum en Platja den Bossa y del San Remo en Sant Josep que ha dictado el Consell d'Eivissa.

El secretario general de UGT en las Pitiüses, Diego Ruiz, aseguró que el sindicato entiende que cualquier incumplimiento de la normativa turística debe ser sancionada y que por lo tanto, «el Consell está cumpliendo con su función de controlar que los establecimientos tengan sus permisos correspondientes y que haya una garantía para los usuarios». No obstante, Ruiz calculó que unas 130 familias podrían verse afectadas por estos cierres, un centenar de personas en el Mare Nostrum y unas 30 en el San Remo. Por este motivo, piden el encuentro con Mayans se celebre mañana, para que les «explique de primera mano los motivos de las clausuras y para saber si estas órdenes se ejecutarán inmediatamente o si bien, cabe la posibilidad de mantenerlo abierto durante la temporada turística».

Desde UGT no descartan más cierres hoteleros por motivos similares, ya que durante el invierno muchos empresarios aprovechan para realizar obras que «a lo mejor no tenían los correspondientes permisos». En cualquier caso, «esperamos que si se producen medidas similares se tenga en cuenta la situación de los trabajadores».

UGT también valoró positivamente que la Fiscalía haya abierto otra investigación sobre las contrataciones de trabajadores supuestamente irregulares del Grupo Playa Sol perteneciente al empresario Fernando Ferré. «Consideramos positivo que, si hay una vulneración de los derechos de los trabajadores porque no se está cumpliendo el convenio colectivo de hostelería de Balears, la Fiscalía siga investigando para averiguar si hubo incumplimiento en la redacción de los contratos fuera del país y por debajo del salario nacional».

El presidente de la Federación Hotelera, Roberto Hortensius, manifestó ayer «como ya lo hemos hecho en ocasiones anteriores, que queremos que las instituciones velen por que se cumpla la ley y se dé el mejor servicio posible a los clientes». De momento, el Consell ha realizado 300 inspecciones para comprobar que los establecimientos cumplen los metros cuadrados por turista que marca la ley. En este sentido, Hortensius valoró positivamente el trabajo de la Institución y afirmó que le parecía «lógico que el Consell quiera hacer inspecciones para comprobar que los establecimientos están a la altura que exige la ley turística».

Asimismo, el presidente de la Federación aseguró desconocer los hoteles que incumplen la normativa. «Pienso que si la Conselleria les dio licencia es porque cumplían la ley, pero también se pueden haber hecho obras. Es muy difícil tener un control», afirmó.