Las últimas denuncias por presuntas contrataciones irregulares de trabajadores extranjeros dentro del Grupo Playa Sol (GPS), del empresario catalán Fernando Ferré, serán investigadas por la Fiscalía de Eivissa que, incluso, no descarta solicitar el encarcelamiento del hotelero en función de la gravedad de los hechos cometidos y de las pruebas de su responsabilidad que puedan reunirse.

Fuentes del Ministerio Público confirmaron ayer que hoy mismo se pondrán en contacto con la Policía Nacional y la Inspección de Trabajo para pedir todos los informes y documentación que se haya obtenido de las visitas a hoteles del grupo GPS llevadas a cabo estos dos últimos días.

«Una vez se disponga de toda la información se valorará qué elementos concurren y si se debe continuar con el proceso», explicaron las mismas fuentes, que apuntaron que «a priori, y sin entrar a valorar nada hasta que no tengamos todos los datos, podríamos encontrarnos ante un delito contra el derecho de los trabajadores».

De confirmarse las irregularidades habrá que concretar en supuestos ilícitos se ha incurrido para determinar la pena que se solicitaría y que podría ser de entre seis meses a tres años de prisión o de entre dos y cinco años de cárcel.

En el primer caso incurrirían «los que, mediante engaño o abuso de situación de necesidad impongan a los trabajadores a su servicio condiciones laborales o de Seguridad Social que perjudiquen, supriman o restrinjan los derechos que tengan reconocidos por disposiciones legales, convenios colectivos o contrato individual», según el artículo 311 del actual Código Penal.

El segundo castigo se aplicaría a «quienes recluten personas o las determinen a abandonar su puesto de trabajo ofreciendo empleo o condiciones de trabajo engañosas o falsas, y quienes empleen a súbditos extranjeros sin permiso de trabajo en condiciones que perjudiquen, supriman o restrinjan los derechos que tuviesen reconocidos por disposiciones legales, convenios colectivos o contrato individual». Así figura en el artículo 312 del mismo código.

Carcel preventiva

Una vez se estudien los informes de Trabajo y de la Policía Nacional, «si se aprecian indicios de actuaciones lo suficientemente graves, y teniendo en cuenta su reincidencia, no se descarta pedir alguna medida excepcional como la detención del señor Ferré», apuntaron fuentes de la Fiscalía.

Fernando Ferré ha pasado en numerosas veces por los juzgados acusado de irregularidades respecto a la contratación y empleo de trabajadores. De hecho, en estos momentos está acusado de un delito contra el derecho de los trabajadores, otro de infracción de las normas de prevención de riesgos laborales y una última imputación de amenazas. Por todos estos cargos, el Ministerio Público ha solicitado un condena de 10 años.

Ferré está acusado de haber empleado de forma ilegal y en condiciones abusivas a decenas de trabajadores extranjeros a quienes empleó en las obras de reforma de los hoteles S'Estanyol y San Remo, en Cala de Bou. Esta situación fue atajada por la Policía Nacional e Inspección de Trabajo en febrero de 2005.

Los inspectores de Trabajo, junto con agentes de la Policía Nacional, realizaron ayer al menos una revisión del hotel Mare Nostrum (Platja d'en Bossa) del grupo GPS, aunque podría haber visitado otras dependencias de empresas de Ferré, según fuentes sindicales.

Al respecto de estas revisiones, portavoces tanto de UGT como de CC.OO. mostraron su satisfacción porque se esté actuando, pero lamentaron que el tiempo transcurrido desde la denuncia puede haber hecho «que algunas cosas no puedan ser demostradas».

Desde Comisiones se informó que hoy esperan tener la traducción oficial de los contratos en checo, tras lo cual presentarán denuncia ante Trabajo. Además, solicitarán una reunión con el responsable de este departamento para conocer la situación de primera mano.

Tanto este sindicato como UGT apuntaron ayer la necesidad de que Trabajo realice inspecciones «preventivas» en los centros de Ferré «atendiendo a los precedentes».