olver a reír como un niño, sin preocupaciones de ningún tipo. Ése era el principal objetivo que tenía la primera sesión de la jubiloteca que celebró ayer el Hogar Ibiza. «Con el paso de los años nos cuesta más disfrutar del juego, de la risa», explicó Ana Serapio, psicóloga y monitora de risoterapia. Y añadió: «Esas preocupaciones, esos problemas aumentan con la edad. Las personas mayores han tenido que superar muchas dificultades y siempre han tenido muchas complicaciones». Por ello es fundamental que los mayores se relajen mediante la risa: «Ahora que están jubilados tienen más tiempo para disfrutar y eso es lo que intentamos». Así, entre los principales beneficios de estas sesiones de risoterapia en las personas mayores destacan los médicos y los sociales. Dentro de los primeros, por ejemplo, la parte lúdica se complementa con la vertiente más deportiva, pues hacen ejercicio en todo momento: «En cuanto a los beneficios sociales destacan el aumento de la autoestima, la superación de la timidez y la vergüenza, por ejemplo».

Durante la primera sesión de ayer, los alumnos, la mayoría mujeres, rieron a gusto con ejercicios tan divertidos como sentirse un animal, elegido por Ana, y buscar a su pareja de la misma especie únicamente con los sonidos típicos del animal. Con algo más de una hora, todos consiguieron sacar al niño que llevan dentro jugando a la conga y al corro de las patata, por ejemplo. Todo ello aderezado con música de todo tipo, sobre todo canciones infantiles. María José Real

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