Miquel Nadal fue elegido ayer nuevo presidente de Unió Mallorquina (UM) con el 74'8 por ciento de los votos a favor y ninguno en contra, en el transcurso del décimo congreso, en el que se ha marcado como objetivo que el partido deje de ser «bisagra» para convertirse en «mayoritario».

La nueva ejecutiva que preside Nadal, que tras consensuar una lista unitaria ha sido el único aspirante a sustituir en el cargo a María Antonia Munar, que lo ha desempeñado durante los últimos quince años, ha sido escogida con 226 votos a favor, 73 en blanco y tres nulos.

En su comparecencia ante los periodistas, Nadal se ha mostrado «emocionado» y ha quitado hierro al hecho de que el 25 por ciento de los compromisarios haya votado en blanco, al asegurar que prefiere eso a una unanimidad ficticia, ya que pone de manifiesto que UM es un partido «plural», capaz de acoger la discrepancia.

Entre los objetivos de esta nueva etapa, ha citado crecer en Menorca y Eivissa, para lo cual intentará llegar a acuerdos con «ciudadanos» que tengan las mismas sensibilidades que UM; y que el partido deje de ser bisagra para ser mayoritario en Mallorca, capaz de pactar con formaciones políticas de similar ideología.