Más de un centenar de personas se sumaron ayer a la tercera caminata organizada por la Plataforma Antiautopista desde Sant Rafel hasta Es Puig en Sant Antoni. En este recorrido, Alejandro Matallana y Elva Alonso, dos integrantes de la Plataforma, explicaron los cambios que se han producido en la carretera de Sant Antoni a consecuencia de las obras, como la variante de Can Tomàs. En este sentido, Fanny Tur señaló que la variante de Can Tomàs «no es un desvío sino que la carretera hace una curva para volver a incorporarse a la carrera tradicional; se ha expropiado a la familia de Es Puig para que la carretera llegue más cerca al agroturismo y al futuro campo de golf». En su opinión, se trata de «un desvío injustificado; un traje a medida para los intereses empresariales del Grupo Matutes». La Plataforma recalcó, además, que con esta obra «no se van solucionar los problemas de tráfico por mucho que digan»

La Guardia Civil custodió la caminata. Tur aseguró que estuvieron «muy amables, correctos, cerrando el tráfico para que pasáramos». En las anteriores caminatas, se contó con la presencia vigilante de las Fuerzas de Seguridad pero no hubo ningún contacto.

A la excursión, que empezó a las diez de la mañana en Sant Rafel y acabo a las 13 horas en Es Puig, acudieron algunos expropiados como la familia de Ca na Palleva , Can Pascual y Can Malalt así como integrantes de PSOE-Eivissa pel Canvi como Albert Prats, Marian Suarez y Josep Marí Ribas 'Agustinet', Àngeles Mostazo o Paquita Ribas.