La Asociación Cultural Flamenca necesita un local para ampliar estos cursos de integración.

Las iniciativas con una pretensión tan positiva como la organizada por la Asociación Cultural Flamenca de Eivissa, que ha puesto en marcha clases de guitarra, percusión y pronto también de danza para chavales con problemas de integración, acaban por conseguir sus objetivos a pesar de los obstáculos. Y es que Marcial Rodríguez, responsable de los cursos de guitarra, se ha visto obligado a iniciar las clases, que se imparten en Can Ventosa, sin el material necesario.

«No tenemos guitarras porque estamos a la espera de que llegue la subvención que hemos solicitado a la Conselleria de Cultura y de Benestar Social», explica. Mientras tanto, este profesor se conforma con repartir los grupos y enseñarles con una única guitarra, la suya. La inscripción continúa abierta. Tienen 10 y 11 años, los dos se llaman Francisco y se han propuesto aprender guitarra y percusión. Disfrutan y se plantean el aprendizaje con miras futuras: «Podremos tocar y así ganar algo de dinero», dice el mayor.

En total son una treintena de alumnos los que se han inscrito, la mitad de ellos se benefician de la subvención dirigida a chicos y chicas con problemas de integración y el resto deben pagar el 50% de la matrícula. «El objetivo para esos chicos a los que nos dirigimos es que a través de la música se integren y se vuelvan más disciplinados . Pero queremos dejar claro que también puede inscribirse cualquier otra persona», explica Marcial.