El mayorista italiano Italtourist, propiedad de la empresa Rarum SPA con sede en Milán, ha dejado deudas por valor de 600.000 euros (unos 100 millones de pesetas) entre varias agencias de viajes de Eivissa y Mallorca, donde cuenta con mucha actividad. Este es el volumen de impagados más importante de los últimos años que se ha detectado en el sector turístico insular y, según declaró el presidente de la patronal de agencias del sector, Aviba, se debe a la crisis que registra la actividad vacacional este año.

Varios abogados de las Islas han iniciado acciones judiciales en Milán con el objetivo de recuperar parte de la deuda, meta que parece «problemática» a juicio de la patronal de las agencias, debido a las dificultades que entraña cobrar cantidades importantes en Italia. Las últimas grandes quiebras de grandes empresas italianas corresponden a la década de los noventa, con Ciesse Tour y Aviatour, que se saldaron con grandes perjuicios para los hoteleros de las Islas.

En temporada alta el touroperador Italtourist organiza las vacaciones de un millar de turistas italianos. Sus problemas económicos empezaron a ser detectados este mismo ejercicio, cuando las agencias de viajes de las Islas con las que operaba comprobaron que aplazaba los pagos más inmediatos. Las empresas afectadas informaron de la situación a la patronal Aviba que dio instrucciones expresas a sus asociados para que se abstuvieran de trabajar con Italtourist, ante el peligro latente de que no cumpliera con sus compromisos económicos.

Una de ellas, no obstante, ignoró estas recomendaciones y se hizo cargo de los clientes aportados por Italtourist. Por esta razón fue expulsada de la patronal. Se trata de la primera vez en la historia de Aviba en la que se ha visto obligada a adoptar una decisión de esta naturaleza, pero aseguran que no quedó otro remedio ante la cuantía de los impagos que había dejado Italtourist. Las agencias han establecido un seguimiento de los compromisos de pagos de los touroperadores extranjeros ante la caída de los niveles del negocio vacacional tras los atentados terroristas de EE UU.