La empresa Infilco y el Instituto Balear de Saneamiento (Ibasan) deberán informar en el plazo de un mes al titular del juzgado de primera instancia e instrucción número 1, Juan Carlos Torres, sobre el funcionamiento de la estación depuradora de aguas residuales (Edar) de Eivissa, foco constante de malos olores que ha motivado numerosas quejas vecinales y del Consistorio, así como la presentación de varias denuncias. El director territorial del Ibasan, Ramon Mayol, y la jefa de planta de esa Edar, Marta Vicente, fueron requeridos ayer en ese juzgado como testigos de este asunto, sobre el que el juez está recabando información para determinar si procede archivarlo o, por el contrario, proseguir las actuaciones. Infilco es la empresa que se encarga de explotar esa planta.

De momento, también han sido llamados Francisco López Badía y Agustín Torres, propietarios y vecinos de la zona, la avenida Vuit d'Agost, que han presentado reiteradas denuncias por los malos olores y el vertido de aguas fecales en las cercanías de la instalación y en el torrente de sa Llevanera. Ambos se ratificaron ayer en sus denuncias.

El hedor que genera esa planta motivó el pasado año la creación de una asociación de vecinos destinada a luchar por la defensa de su salud. De hecho, un informe establece que dentro de la planta se emiten unos gases cuyas proporciones pueden ser perjudiciales para los trabajadores. Otro estudio determinó que los olores nauseabundos se extienden por un radio que alcanza Vila, lo que impulsó al Ibasan a iniciar una serie de inversiones destinadas a paliar ese problema. Según Mayol, a partir del día 1 de julio se debe comenzar a notar la mejora, que ahora obliga a los vecinos a vivir con las ventanas cerradas y que está causando graves problemas económicos a diversas empresas turísticas radicadas en las cercanías.

Recientemente, la Conselleria balear de Medi Ambient descartó trasladar la depuradora lejos de una zona poblada, ya que el gasto sería muy elevado (25'7 millones de euros) y porque no permitiría rentabilizar la instalación actual.