El director general de Residuos del Govern, Nicolau Barceló, ha tardado dos meses en cambiar de opinión. El pasado 13 de marzo anunció que la Conselleria balear de Medi Ambient enviaría inmediatamente a la Guardia Civil y al Ayuntamiento de Sant Antoni una solicitud para el cierre de una finca de Sant Mateu en la que, según sus palabras, se habían vertido «botes de pintura, ordenadores y electrodomésticos», objetos que podrían provocar serios daños medioambientales. También dijo que se abriría un expediente sancionador al propietario.

Esa solicitud llegó finalmente al Consistorio de Sant Antoni el pasado viernes 10 de mayo, pero en ella no se indicaba la acuciante necesidad de precintar el 'vertedero'. La concejala de Urbanismo de esa localidad, Blanca Castiella, no salía de su asombro cuando después del alarmante anuncio de Barceló no encontraba en el documento enviado por Medi Ambient ninguna referencia a la urgente necesidad de cerrar esa finca. En él sólo se explica que un funcionario realizó una inspección en la que encontró residuos «urbanos no peligrosos». Además, Medi Ambient se limita a hace saber que es el Ayuntamiento el que tiene la potestad de sancionar en ese caso: «Esto es un bluff», dijo Castiella, quien recordó el jaleo que montó la oposición progresista del Consistorio con ese asunto, ya que la empresa encargada de abrir esa zanja y de cubrirla de nuevo pertenece al edil de Hacienda, Juan Riera, Estret.

La concejala de Urbanismo indicó que lo que hará el Ayuntamiento ahora será, simplemente, notificar al propietario la necesidad de retirar los objetos peligrosos, si los hay, si bien el aspecto que suele ofrecer esa finca es de pulcritud. El anunciado precinto se queda, pues, en nada. Castiella advierte de que, casi seguro, ni siquiera se impondrá una sanción. Cuando Barceló anunció el cierre del 'vertedero' de Sant Mateu señaló que ese asunto era más «preocupante» que el de Cala Tarida, en Sant Josep, donde se amontonan más de 25.000 metros cúbicos de escombros: «Es menos serio ese caso que el de Sant Mateu», dijo.