Las Pitiüses dejarán de tener Banco de Sangre insular, cuya sede se encuentra en el hospital Can Misses, a partir del 7 de mayo ya que se unificará con el Banco Comunitario de Balears. Una medida que se adopta para adaptarse a las normativas comunitarias y ajustarse a los estándares de calidad. A partir de ahora, Can Misses será la sede sólo del banco hospitalario. Este cambio no repercutirá en la extracción de sangre, que seguirá haciendo en Eivissa, pero sí en el fraccionamiento y el procesamiento analítico de la sangre que se realizará en Palma.

El número de bolsas que se fraccionan en Eivissa son 2.500 al año, mientras que en Palma se procesan 35.000 bolsas. Esta es la razón que ha determinado que el procesamiento se haga en Mallorca y que desde allí se distribuya a las diferentes islas, según las necesidades. «Eso no significa que se van a perder los donantes de las Pitiüses. Con la unificación aumentarán los recursos de hacer campañas y se promocionará más la donación», precisa la doctora María Udina.

Una de las razones de peso para esta unificación ha sido que se exigen cada vez más requisitos para tener una calidad óptima la sangre. Así, una directiva comunitaria, que entrará en vigor a partir de 2004, contempla la obligatoriedad de reducir al máximo el número de leucocitos en la sangre que se transfunde, ya que la mayoría de los virus están dentro de los leucocitos como el que produce «el mal de las vacas locas». Este sistema de extracción de los leucocitos «es bastante sofisticado, requiere mucho tiempo, personal y encarece el proceso de fraccionamiento de la sangre y ese ha sido el motivo principal para unificar», explica la doctora Udina.

Para desarrollar este trabajo, se tendría que doblar el personal en Can Misses y adquirir máquinas muy costosas. «El encarecimiento va ocurrir igualmente, pero resulta más rentable comprar una máquina para 38.000 bolsas de sangre que para 2.000», añade. Una de las cuestiones que se ha resolver es solventar los problemas logísticos que supone el transporte en avión de las bolsas. El coordinador de todo este proceso será el doctor José Balanzat. Cruz Roja colaborará en este proceso encargándose del transporte. Dos veces por semana se mandará desde Palma a Eivissa la sangre procesada que se necesite. El cambio, a partir de mayo.