En guardia contra el fuego

Pese a las lluvias caídas este año, Medi Ambient advierte de que prosigue el peligro de incendios forestales

05/04/02 0:00

J. M. R. «La pluviometría ha sido algo mejor este año que los anteriores, pero el peligro no ha variado demasiado en términos absolutos». El director general de Biodiversidad, José Manuel Gómez, advertía ayer con esas palabras de que sigue siendo muy alto el riesgo de incendios forestales en buena parte de la geografía pitiusa, especialmente debido a los cinco años de sequía que se arrastran: «Esa circunstancia nos impide bajar la guardia», subraya. Gómez, junto a la consellera balear de Medi Ambient, Margalida Rosselló, explicó ayer en rueda de prensa el plan insular de defensa contra los incendios forestales de este año, para el que se contará con seis nuevos guardas, cinco en Eivissa y, por primera vez, uno en Formentera.

Además, ya se ha desplazado a las Pitiüses el avión de lucha contra incendios y una nueva brigada de actuación. El plan insular de defensa contra incendios detalla también una serie de actuaciones que se llevarán a cabo en los próximos 10 años y que supondrán una inversión de 13'3 millones de euros. El plan detalla en mapas los puntos de mayor riesgo, todos obvios: La Mola (Formentera), es Amunts, sa Talaia de Sant Josep, Cala d'Hort y Cala de Sant Vicent. Es este lugar, donde en 2001 se produjo el mayor incendio del año, el que representa más peligro debido a la escasez de lluvias caídas allí durante el último lustro y a su abundante masa forestal.

También se destaca en el plan la dificultad existente en las Pitiüses para que los medios contra incendios alcancen los focos. El acceso a buena parte de las zonas boscosas de Sant Joan, Sant Antoni y Sant Josep, así como a toda la isla de Formentera tardaría más de cuatro horas. Entre las actuaciones que se llevarán a cabo en lo que queda de década destacan la redacción de 17 planes de defensa de urbanizaciones (para la creación de zonas de protección) y la construcción de ocho puntos de agua (de 50.000 litros cada uno) y cuatro torres de vigilancia, de las que una es inminente. Por otra parte, se abrirán 205'8 hectáreas de cortafuegos y se mantendrán y mejorarán 20 kilómetros de pistas forestales.