Abscesos (bolsas de pus), fibromas blandos (verrugas), nebus piloso (lunares), heridas y laceraciones, quistes de grasa o uñas encarnatas (uñero). Estas son algunas de las lesiones más frecuentes que realizan los médicos de familia en los centros de salud a los usuarios sin necesidad de ir al hospital Can Misses.

Pedro Riquelme es paciente del doctor Antonio Ruiz Expósito, del centro de salud de Es Viver. El pasado viernes, 1 de septiembre, fue citado en el centro para extirparse un lunar. La intervención realizada con anestesia local en la sala de curas de es Viver no duró más de 16 minutos. Dentro de una semana tendrá que volver a que le retiren los tres puntos que le colocaron. El nebus piloso extirpado se envía al laboratorio de Anatomía Patológica de Can Misses, donde se analizará. Antes de la intervención, el doctor Ruiz Expósito ha comprobado que no se trata de ninguna lesión maligna y que no existe ningún tipo de contraindicación. Además, el paciente ha firmado un consentimiento informado.

Hay dos cuestiones que justifican el desarrollo de este tipo de servicios: va en beneficio del paciente porque le permite ahorrar tiempo y, además, supone una descarga de trabajo para el hospital.

Durante 1999 se pactaron 161 pacientes de cirugía menor, pero se alcanzaron 741. Esta cifra se debe a que, además de los casos programados, se incluyeron aquella que se hace habitualmente, como drenaje de abcesos o las heridas y suturas. Para este año se ha pactado 741, que corresponde al número de casos alcanzados el año pasado, distribuidos de la siguiente manera: Can Misses con 58 casos, Es Viver con 130, Sant Antoni 318; Santa Eulària registró 26 y Formentera alcanzó los 209, donde hay más urgencias.