Llegaron andando desde Sant Joan con lo puesto, y apenas unas horas después parecían dispuestos a salvar el planeta. 40 escolares de edades comprendidas entre los tres y los once años participaron ayer en Can Martí en una jornada diseñada por Amics de la Terra de Eivissa en la que tuvieron la oportunidad de conocer una cuestión que afecta al 40% del suelo de nuestro país: la desertificación y que, según la presidenta de la organización ecologista promotora de la actividad, Hazel Morgan, «es también uno de los problemas más importantes de la isla».

El motivo de la cita: el Día Mundial contra la Sequía y la Desertificación que se celebra hoy en todo el mundo en una fecha ideada por la ONU hace seis años con el objetivo de alertar sobre este proceso de degradación paulatina y de pérdida de productividad de las tierras áridas y semiáridas, y que si no es paliado, culmina con la desertización. La falta de lluvias y las trombas de agua repentinas son las principales causas de este fenómeno que avanza a un ritmo vertiginoso en los últimos tiempos.

A lo largo de varias horas, los escolares de las Unitarias, procedentes de centros de las localidades de Santa Agnés, Sant Mateu y Buscastell, aprendieron la importancia de las energías alternativas con una demostración in situ (ya que la finca ecológica cuenta con varias placas solares); contemplaron la labor depuradora de determinadas plantas; se atrevieron a duplicar el número de preguntas formuladas en una gincana y supieron algo más acerca del Comercio Justo, una fórmula que elimina los intermediarios entre productores de naciones en desarrollo y consumidores de países más avanzados.