Las pizarras de papel instaladas en el MAC para los artistas espontáneos tuvieron que ser ocultadas por papeles nuevos.

Pocas ocasiones son las que, en exposiciones de cualquier tipo, el público que asiste a las mismas pueden dejar su impronta en ellas. Este es el caso de la que acaba de clausurar el Museu d'Art Contemporani d'Eivissa (MAC), «Vina a veure», en la que casi 1.600 niños y jóvenes se han atrevido a ejercer de artistas por unos momentos participando en la elaboración de un mural colectivo además de dibujos de todo tipo en blocs preparados a tal efecto.

Elena Ruiz, directora del MAC, mostraba ayer su satisfacción por la experiencia durante las tareas de desmantelamiento de la exposición. Para Ruiz, «ya hay mucha gente que no quiere ejercer de mero espectador durante las exposiciones, sino que desean poder expresar sus opiniones sobre las mismas». Y, de este modo, uno de los apartados de «Vina a veure» se tituló muy expresivamente «Dibuixa, escriu, inventa, expressat...».

Y los visitantes recogieron el desafío lanzado desde el MAC. Los primeros murales de papel colocados en el espacio designado han tenido que ser repuestos y cubiertos con otras láminas de papel debido a la densidad de dibujos y textos de todo tipo incluidos en ellos. Desde elaboradas ilustraciones hasta las aspiraciones artísticas de los más pequeños -lógicamente situadas en la parte más baja de la pizarra-, pasando por recordatorios a profesores para que aprueben la asignatura pertinente aquellos que cumplieron con la visita al MAC.