En este empezar de nuevo, Roselló considera que sería interesante la intervención del «equipo» de la presidenta del Govern y del PP, Marga Prohens. «Una autoridad común», ha explicado el vicepresidente de la CAEB, «debe hacer posible que se empiece sobre una base nueva. No me refiero tanto a una autoridad con poder, que también, sino a una autoridad con autorictas valga la redundancia. Una autoridad confiable, reconocida, que genere a ambas partes la confianza suficiente para empezar de nuevo». Y ha añadido: «No se trata tanto de disciplinar como de ser un punto de referencia de la confianza. El poder financiero y normativo solo se debe emplear para emplazar a las partes a colaborar en aras de un bien superior a los intereses particulares. Marga Prohens tiene un importante capital político, que se lo está ganando día a día. Además, ha reorganizado su partido. Tiene empatía, capacidad innata de iniciativa y autoridad para dar un golpe de timón».
«Acabar con la situación»
Roselló ha lamentado la ruptura entre Llorenç Córdoba y José Alcaraz, presidente del PP en Formentera y exconseller de Promoción Económica, cesado por el primero semanas atrás. Sobre Córdoba, ha recordado que fue él mismo quien le propuso ser el representante de la CAEB en la Cámara de Comercio de Ibiza y Formentera. «Realizó su trabajo a plena satisfacción de la institución», ha explicado, «es una persona muy válida». En cuanto a Alcaraz, Roselló ha señalado que lo conoció «cuando despuntaba como un político joven». «Me genera gran incomodidad y pesar personal constatar este enfrentamiento», ha lamentado, «hay que acabar con esta situación».
A juicio de Roselló, es necesario tener claro que la figura del presidente en el Consell de Formentera «es clave»: «No es una persona supeditada a los concejales o consellers. Más bien lo contrario. Por ello es un fuego de artificio pretender expulsar al propio presidente».
El vicepresidente de la CAEB para las Pitiusas, por otro lado, ha señalado que tanto Llorenç Córdoba como Sa Unió son responsables de la situación que atraviesa actualmente el Consell de Formentera. Así, ha señalado que el presidente insular «cometió un error importante al airear públicamente su malestar, nada menos que amenazando a la propia presidenta Prohens». Algo que califica de «sacrilegio en términos políticos». A la vez, Roselló considera que los consellers de Sa Unió no han reaccionado «con cintura ante al problema de fondo». «Puede que Córdoba tuviese su parte de razón», ha añadido, «el ataque personal nunca es una buena toma de razones en política. Cada persona tiene su dignidad».
«El PP debe abordarlo»
Roselló también ha señalado que es posible que alguien tenga que «ser sacrificado» para poner fin a la crisis, sin señalar quién, en su opinión, debería salir de la institución. Sin embargo, sí ha dejado claro en este sentido que «es el PP quien debe abordarlo». «Nadie debe quedar desasistido», ha apuntado, «sobre todo cuando se controlan toda las instituciones». En cuanto al papel que están jugando GxF y el PSOE en la crisis, el vicepresidente de la CAEB ha indicado que «hacen bien en no entrar en la dinámica de una supuesta moción de censura» si esta tiene como único objetivo sacar a Llorenç Córdoba de la presidencia del Consell. Y más teniendo en cuenta que, de llevarse a cabo, estaría articulada por cuatro formaciones «bastante diferentes entre sí». «Seguramente conduciría a una situación peor», ha señalado.
El vicepresidente de la CAEB ha insistido en que es necesario que Sa Unió y Llorenç Córdoba alcancen un acuerdo que permita el retorno de la normalidad al Consell. Ha recordado que «la obtención de la mayoría absoluta en mayo de 2023 fue una gran gesta común», considerando que el electorado formenterés se inclina hacia la izquierda. «La gesta de Sa Unió fue todo un hito político», ha indicado, «Córdoba no sería nada sin el PP ni Compromís pero ellos tampoco hubieran ganado las elecciones sin él. Fue el cabeza de cartel, el número 1 de la lista. Empleando un símil futbolístico, Córdoba fue el jugador que marcó la diferencia, que permitió obtener la mayoría absoluta. Todos son copartícipes del éxito y es ridículo echar ese capital político por la borda».
José Antonio Roselló, finalmente, ha descartado que sea posible gobernar el Consell en la situación actual. Y es que, ha subrayado, «no es realista que el presidente gobierne con solo uno o varios funcionarios de confianza». «La dispersión de asuntos es tan grande», ha añadido, «que no resulta realista. No hay alternativa a trabajar en equipo». Eso sí, también ha dejado claro que para rehacer las alianzas entre Córdoba y Sa Unió es necesario dejar a un lado cuestiones como la de los sobresueldos que el primero habría pedido a Prohens y al PP como diputado autonómico. En este sentido, José Antonio Roselló considera que es posible que las nuevas responsabilidades políticas de Córdoba y el cierre de su clínica le hayan provocado «una merma económica». Sin embargo, también considera que «como se dice en política, se viene llorado de casa», aunque «objetivamente pueda tener cierta razón». También cree que, sin «pruebas concretas», no debe seguir hablándose de los «supuestos intereses ocultos» de unos y otros en el control del Consell: «Desde fuera no tenemos información y tanto Córdoba como Alcaraz han hecho declaraciones genéricas sin más. No hay pruebas concretas y esperemos que todo sea fruto de los respectivos calentones».
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