Otro caudaloso vertido de fecales por el torrente de sa Llavanera. Otro más. Delito continuado contra el medio ambiente. Es lo mismo que lleva años saliendo por el emisario que solo cambiaron de lugar cuando se sacó de Talamanca y el Ministerio de Medio Ambiente tomándose con tranquilidad la construcción de la nueva depuradora, con total desidia y sin utilizar el trámite de urgencia o de emergencia, que procedería en este caso, que la ley regula. Poc a poc